LISET ESPINOZA

LA PATRIA | MANIZALES

Para hablar debe presionar el botón. Oprime y al ver la luz verde cuenta mentalmente hasta tres, como se lo indicaron: “Cruz Roja Manizales, Cruz Roja Tolima, reportándome desde la finca El Delirio, Aquimín Roso Moreno, ¿cómo me escuchan?”... el silencio hace que salga de su casa, busque mejor señal y de nuevo enuncia su ubicación obteniendo esta vez un "recibido" como respuesta.

Esa fue la prueba de ensayo del radio que recibió de la Cruz Roja para comunicar cómo se encuentra y qué anomalías ve ante una posible erupción del volcán Nevado del Ruiz que hoy cumple un mes en nivel de actividad naranja. Él está a seis kilómetros en línea recta del Cumanday.

El organismo de socorro llegó a él por medio de Fabio Salazar Rivera, propietario de la finca de 120 hectáreas en la que labora Aquimín, quien justo cuando pretendía ingresar a su predio, se topó con los socorristas y los guió hasta la residencia a la que no es fácil acceder. Está situada en la vereda Oromazo, de Casabianca (Tolima) y al transitar por la vía que rodea al Nevado del Ruiz y que conduce a Murillo se hace un alto por el sector conocido como El Tubo para luego descender (una hora) por un amplio valle de frailejones.

Jorge Andrés Bravo, analista de telemática del equipo de gestión de riesgo y de desastres de la Cruz Roja Colombiana, expresó que el objetivo es mantener a las comunidades conectadas y por ello, con recursos de la Unidad Nacional de Gestión de Riesgo adquirieron 22 radios para la parte alta del Tolima. “Estamos visitando a esas familias que no han salido o que no van a salir para dejarlos comunicados a través de una red comunitaria que llega a Manizales y a Ibagué. La idea es que informen de cambios en la parte cercana al volcán y en caso de tener que evacuar recibir instrucciones para hacerlo o si quedan en algún punto puedan informarlo”, indicó.

Los dos miembros de la Cruz Roja caminan por los predios de la finca El Delirio junto con Fabio Salazar Rivera para llegar hasta la casa de Aquimín.

Miedo a la roca

En El Delirio, aparte de frailejones, se cultiva papa, se produce leche y hay aproximadamente 75 cabezas de ganado. Según Aquimín, de 57 años, hasta el jueves no había ido ningún delegado de Casabianca que le hablara de qué hacer ante una erupción para proteger el cultivo y los animales. "Me tocaría echar de aquí para abajo e irme a una cueva que está detrás de la casa a unos 15 minutos, pero no tengo miedo porque me tocó la avalancha de 1985 y en esa época vivía en Ventanas (vía Murillo), en la finca Mundo Nuevo. Ese día me dieron nervios, pero del mismo miedo saca uno fuerzas. Nos quedamos en la casa unas ocho personas y no nos pasó nada, claro que hubo caída de ceniza y de rocas que acabaron con todo. Estoy tranquilo. Aquí da miedo es por la roca porque los ríos están lejos, pero uno nunca sabe".

Actualmente vive con su esposa y tres trabajadores. Asimismo, la leche que producen (entre 80 y 100 litros) la transporta en sus mulas La Muñeca y La Guayaba, a las que a su vez acompañan sus perros Tomás, Tobi y Sara hasta el sector de El Tubo, pues allí le reciben la leche que venden a una quesera de Manizales.

“Hasta el momento no hemos tenido dificultades con el lechero, pues sube sin problema hasta la vía a Murillo. Día de por medio subo y bajo la montaña para sacar la producción y entregársela”, anotá Aquimín, quien luce sus mejillas sonrojadas por el frío de la zona (3 mil metros sobre el nivel del mar).

Aquimín con sus mulas y sus perros.

Especie de búnker

En medio de un fogón de leña, Fabio afirma que para salvaguardar la vida de sus trabajadores construirá una especie de búnker. “Por experiencia de la erupción pasada (1985), si la gente sale corriendo la puede lastimar más fácil una roca. Entonces construiré un búnker con cuatro columnas en concreto. En la parte superior irá una plancha del mismo material y encima de ella pondríamos bultos de arena (sirve de aislante) de manera que si la piedra cae, no queme ni dañe”.

Añadió que en el sitio, los trabajadores contarán con caretas de gases especiales (las consiguió con una multinacional), pito, radio, velas, fósforos, linterna, dos cobijas térmicas, alcohol, tapabocas, algodón, enlatados y agua. Asimismo, hará una tapa en concreto para cubrir los bebederos del ganado y que no corran riesgo.

"El mayor problema que se tendría sería con el pasto porque la ceniza lo cubre y no podría ser consumible por el ganado. Si hoy hace erupción el volcán no tendríamos pasto mañana y por ende el ganado se moriría de hambre. La idea es que nos doten de rastrillos metálicos para limpiar los pastos porque no contamos con esas herramientas”.

Sin ayudas

Según Fabio, geográficamente pertenecen a Tolima, pero por vías de acceso la conexión es más fácil con Manizales. Además, se queja de la falta de presencia de la Alcaldía de Casabianca en su zona. “Aquí nunca han venido y la Gobernación del Tolima se llena la boca diciendo que están repartiendo abonos y bultos de silo (alimento para el ganado), pero a nosotros no nos han traído nada. Son mil 500 cabezas de ganado en el sector y ¿para dónde nos las vamos a llevar? Supongamos que movemos el ganado, pero ¿quién nos cuidará el cultivo de papa?”.

Desde la Oficina de Prensa de la Alcaldía de Casabianca, informaron que la vereda en la que vive Aquimín integra la zona catalogada en riesgo medio y que los funcionarios públicos han visitado a las familias que están en la zona alta de riesgo "llevando información sobre el estado de la actividad del volcán y se les recomendó la evacuación voluntaria como medida preventiva y en días posteriores fue la alcaldesa con el equipo de la Unidad Nacional de Riesgo y el Consejo Departamental de Gestión de Riesgo para evaluar el estado de las vías. También se entregaron kits de primeros auxilios a los presidentes de Juntas de Acción Comunal y frente a la responsabilidad de Invías en la intervención del trayecto de 12 kilómetros Casabianca-Arenillo, como ruta de evacuación ante una posible erupción, se comprometió a hacer el mantenimiento en el menor tiempo posible".

Aquimín recibe las instrucciones de cómo usar el radio en caso de alguna emergencia.

Dato

Jorge Andrés Bravo, analista de telemática del equipo de gestión de riesgo y de desastres de la Cruz Roja Colombiana, indicó a Caldas le entregarán 20 radios para la parte alta de Villamaría.

Categoría

Según la Alcaldía, Casabianca tiene veredas en riesgo alto (Agua caliente, La Meseta y Potreros) medio (Oromazo, La Cristalina, san Ignacio, El Cardal, La Palmera, La Porfía, El Coral, El lembo, La Graciela, La Esperanza, Peñolcitos, Peñotas y Hoyo caliente) y bajo (Casco urbano, San Jerónimo, La Mejora, La Armenia, El Recreo, La Zulia, Porvenir, Agua de Dios, san Carlos, Llanadas y Yumba).