Fotos | Luis Fernando Rodríguez | LA PATRIA
La religiosa Edit María Vergara, madre general de la Comunidad Hermanitas de La Anunciación, portó ayer las reliquias de la beata caldense María Berenice Duque Hencker, durante su veneración en Salamina.
LA PATRIA | SALAMINA
Los salamineños recibieron ayer con alegría y recogimiento las reliquias de primer grado de la Beata María Berenice Duque Hencker que ya reposan en la Basílica Menor de la Inmaculada Concepción de Salamina (Caldas) para ser veneradas por los fieles.
Las reliquias llegaron en peregrinación hasta el sector de Bomberos, de donde partió una procesión a las 10:30 a.m. por la carrera sexta para arribar a la Basílica Menor, allí se ofició a las 12:00 m. la santa misa de acción de gracias y en la noche se presentó a las 7:00 p.m. el musical Vida y Obra de la Madre Berenice en el Coliseo Cubierto en el sector de La Cuchilla.
José Miguel Gómez, arzobispo de Manizales, contó que desde cuando pasó por Salamina, entre los años 1997 y 2003, conoció la fama de santidad de la madre Berenice Duque. "Siempre esperaba que llegara este momento y no imaginaba que me correspondiera precisamente a mí tener esta dicha y este honor de recibir y dejar en la parroquia de la Inmaculada Concepción las reliquias de nuestra nueva Santa", expresó el arzobispo.
Gómez contó que también quedaron reliquias en la Catedral Basílica de Manizales, según él, porque la catedral es la madre de todas las parroquias de esta región y porque Caldas también tiene que reconocer la santidad de sus hijos.
"El acto que hacemos hoy (ayer) en Salamina es supremamente importante y significativo, porque esta fue la cuna de la madre Berenice y por supuesto también el lugar en que ella recibió muchísimas gracias de parte de Dios Nuestro Señor, que según los testimonios de quienes la conocieron se comenzaron a manifestar desde su infancia. Una mujer con deseos de cumplir el primer mandamiento por encima de todas las cosas y de vivir unida a Dios Nuestro Señor haciendo las cosas de la mejor manera posible", agregó monseñor Gómez.
Añadió que Caldas y Salamina están de fiesta porque reconocen a su santa y tienen que ver en ella también una cantidad de hechos y de gracias especiales que llaman a los salamineños y caldenses a una vida cada vez mejor.
La familia
“Como pariente de la madre María Berenice Duque Hencker extiendo esta alegría a todos los salamineños. La beata es un símbolo de la salaminidad, del esfuerzo, de la constancia y de la religiosidad de una mujer que dedicó su vida a servir a los más pobres y humildes”, dijo Fernando Macías Vázquez, pariente cercano a la beata.
Agregó que es un auténtico orgullo poseer una beata tan afín a la familia, que visitaba su casa y un hecho trascendental para la región y la Iglesia católica.
Reacciones
Jaime Tabares Castrillón
Para los cristianos de fe es beneficioso tener a una beata propia a quien a orar. Estas personas acreditan unos milagros y yo tengo fe en los santos.
Erika Johanna López
Como salamineña me siento muy orgullosa de que una mujer como la madre María Berenice esté en los altares. Esto proporcionará a Salamina un mayor nivel de cultura y fe.
Claudia María Muñoz Franco
Esto es algo muy importante para nuestro municipio, ya que la madre Berenice es nuestra y hemos sido privilegiados de haberla tenido acá y haber conocido de tantas maravillas que ella hizo en su momento. Estamos pendientes de lo que va a suceder en el tema religioso.
Consuelo Mejía
Estamos muy contentos con este acontecimiento. Esto va a mejorar la economía de nuestro pueblo. Es importante que a Salamina la conozcan, que vengan a peregrinar y a conocer donde ella nació y empezó su labor religiosa.
Alicia Inés Gómez Naranjo
Creo que ella nos da un gran mensaje de fe, de que las obras pueden hacerse y de que en personas tan grandes como ella podemos creer y pedirle los favores que necesitamos.
¿Qué es una reliquia?
La Arquidiócesis de Bogotá, parroquia Santo Domingo Savio, aclara lo que es una reliquia y la interpretación que se le debe dar. En algunos apartes de la nota se lee: “La reliquia de los Santos son los restos del cuerpo o de una vestimenta de quien fuera un “Santo”. La veneración de las reliquias comenzó a darse con el culto de los mártires, durante el periodo de las persecuciones en las catacumbas”.
Las reliquias pueden ser de tres grados:
Primer grado: fragmento del cuerpo.
Segundo grado: un fragmento de su ropa o de algo que el santo usaba durante su vida. También objetos asociados con el sufrimiento de un mártir.
Tercer grado: cualquier objeto que ha sido tocado por un santo o a la tumba de este.
Errores que se deben evitar en relación a las reliquias:
1- Creer que las reliquias tienen poder por sí mismas. Esto sería magia y superstición. Nuestra atención al venerarlas está en el santo.
2- Exagerar la importancia de las reliquias en la iglesia. Las reliquias pueden ser una ayuda a la fe, pero no son parte central de ella.
3- Despreciarlas o dudar que Dios pueda utilizar sus instrumentos escogidos para hacer milagros según sus designios.
4- Comercializar con reliquias, falsificarlas, explotar a los ingenuos.