LA PATRIA | MANIZALES

Las casi 18 horas fueron de múltiples sentimientos para las cinco personas que estuvieron atrapadas en la góndola de El Nido del Cóndor, en la vereda Papayal de Villamaría (Caldas), el miércoles de la semana pasada.

Juan Camilo Chaparro, Marleny Patiño, Natalia Vidal, Mónica Andrea Sánchez y Cristian Cuervo son las cinco personas que estuvieron a 2 mil 254 metros sobre el nivel del mar. Antes de las 7:00 a.m. se presentó la emergencia cuando ellos, empleados del glamping, quedaron atrapados por causa del desprendimiento de uno de los dos cables de la góndola en la que se transportan para llegar al hotel a comenzar su jornada laboral.

Horas de angustia, miedo, reflexión, diálogo, desespero, apoyo, pero también risas y después felicidad cuando los rescataron fue lo que vivieron cuando estaban suspendidos a 230 metros de altura.

Juan Camilo, el primero en salir a las 6:20 p.m., narró lo que sintió: "Me siento agradecido totalmente porque era una angustia muy maluca estar allá colgado porque la vida de uno se encontraba en peligro. Allá sentía que en cualquier momento mi vida se iba a acabar, que el cable se descolgaba e íbamos a morir. Algunos nos dábamos fuerza, otros llorábamos, por momentos nos reíamos. Fueron muchos cambios de emociones, nos despedíamos de la vida y volvíamos y nos aferrábamos a ella".

Escuche el testimonio completo de Juan Camilo Chaparro

Marleny Patiño, a quien rescataron a las 9:50 p.m., tras unas 15 horas, habló de sus hijos en el momento de pisar tierra. "Yo pensaba en mis hijos, están muy chiquitos para quedarse solos. Cuando ya nos traían era una sensación de alivio. A veces tenía fe y pensaba que esto resiste, pero también que este cable no resiste y que no demora en reventarse. Nos decían que el cable se estaba abriendo, que se estaba deshilachando y que ya no aguantaba. Allá nos dio de todo, recochábamos y llorábamos".

Escuche a Marleny Patiño

Junto con Marleny fue rescatada Natalia Vidal, quien en medio de risas recordó lo que vivió: "Se siente una felicidad enorme porque pensamos por un momento que no lo íbamos a lograr y que no iban a ser capaces de sacarnos de allá. Es como volver a vivir porque nos sentíamos ya casi muertos. Nos aferrábamos a la vida e intentábamos estar calmados, pero había momentos donde la mente ya no aguantaba, entonces llorábamos y sentíamos que se iba a caer. Fue como una montaña rusa de emociones todas esas horas. Fue muy diverso todo lo que sentimos. Uno reflexiona mucho de la vida mientras está allá".

Escuche a Natalia Vidal

A las 12:07 a.m. del jueves rescataron a Mónica Andrea y a Cristian y la pesadilla llegó a su fin.