LA PATRIA | Manizales

La historia de James López en el microfútbol empezó por curiosidad. Fue con unos amigos a una veeduría que hizo Jaime Cuervo con su club y se quedó allí para siempre.

Hoy, 34 años después, James recoge parte de lo que ha cosechado hoy como jugador y como entrenador: será asistente técnico del seleccionado nacional que jugará a finales de este mes el Campeonato Mundial Sub-17 en Paraguay.

"Era jugador de fútbol con Javier Suárez y me invitaron a participar en una veeduría, fui y me quedé para siempre", cuenta el hoy técnico del Real Caldas.

Internado en este deporte, como poste o lateral, James jugó en todas las categorías y representó a Caldas en campeonatos nacionales interclubes.

10 años después de haber cambiado de disciplina, James cambió de posición. Dejó los cortos como jugador y se puso el pantalón largo para iniciar su carrera como técnico. Siempre con el apoyo de Jaime Cuervo Losada y Milton Hernández, actual presidente de la Liga.

"José Echeverry, amigo y compañero, me propuso en el 2000 que formáramos un club en el barrio San José para ayudarle socialmente a ese sector. Así nació el Club Deportivo La Pelusa. Entonces, paso siguiente, me le pegué al profesor Jaime Cuervo, le pedí permiso para estar a su lado, lo aceptó y anotaba todo lo que le veía o escuchaba", recuerda el entrenador.

Al lado de Cuervo y con los seleccionados departamentales, James, por aprender, hizo de aguatero, utilero, masajista y hasta lavandero. Todo lo que aprendía lo replicaba en La Pelusa.

James cuenta que de los procesos con La Pelusa salieron jugadores de la talla de José Yeri Lozano, Carlos Mauricio García, Tomás Morales, Jorge Andrés Ríos y Edwin Gómez, entre otros.

A la par con su crecimiento como jugador y técnico, James fue a la Universidad y se graduó como licenciado en educación física. Pero continuó al lado de Cuervo Losada.

"Hasta les lavaba los uniformes a los muchachos o el profe Jaime, de su bolsillo, me daba los viáticos para viajar con ellos", recuerda el técnico manizaleño.

Finalmente se ganó el espacio en los cuerpos técnicos y empezó la carrera que lo tiene hoy en el cuerpo técnico del Real Caldas y el seleccionado colombiano sub-17.

A lo largo de su ejercicio desde el banco, ha ganado dos títulos nacionales, uno en Manzanares en el 2015 y el otro en Rivera (Huila) y dos medallas en los Juegos Deportivos Nacionales, la plata en el 2012 y el bronce en el 2024.

James, que viene de abajo, como él dice, no olvida a quienes le han tendido la mano: "Jaime Cuervo, Milton Hernández, Jaime Alberto Castellanos, Hárold León, todos, cada uno, desde su capacidad, me ayudaron mucho para ser la persona y el profesional que soy".

De familia

James, con 52 años, nació en Anserma, pero muy niño llegó con su familia a Manizales. Es hijo de Javier López y Dioselina Londoño, y hermano de Julián, Millán, Juvenal, Duván y Julieta. Siempre han vivido en el centro de la ciudad.

Hoy vive en unión libre con Mónica Orozco y es el padre de Santiago y Salomé.

La frase

"Es un sueño, es la oportunidad para la que he trabajado todos estos años. Quiero demostrar que soy competente y quiero dejar el nombre de Caldas en lo más alto".