LA PATRIA | MANIZALES

El gobernador de Caldas, Luis Carlos Velásquez, visitó el municipio de Neira el 22 de diciembre para sortear 10 viviendas, que fueron construidas a través de bloqueras comunitarias. Sin embargo, hoy después de tres meses, siguen esperando su regalo, ya que las casas aún no cuentan con servicios públicos y por eso no han podido ocuparlas.

En su momento, la Gobernación transmitió en vivo el evento en su cuenta de Facebook, en el cual se entrevistaron a los beneficiarios y al alcalde de Neira, Luis Gonzaga Correa. Allí el gobernador celebró: "Qué alegría tan grande que producto del consenso y del trabajo en equipo 10 familias se vayan a comer natilla y buñuelo el día del niño Dios con su propio hogar. Para mí es una satisfacción sin igual", sostuvo.

Hoy persiste ese sinsabor, ya que si bien los usuarios se comieron el buñuelo y la natilla, las casas no han llegado, por lo que tanto opositores de Velásquez Cardona como usuarios reclaman el hogar que se ganaron. Uno de las críticos es el diputado del Partido Conservador, Mauricio Londoño, quien sostuvo: "Hicieron un show, llevaron papayeras, mariachis y les entregaron las llaves y después se las quitaron. Las casas no están escrituradas porque no tienen agua, gas, ni luz, y se están deteriorando. Los beneficiarios son humildes y siguen pagando arriendo" se lamentó.

Los afectados

Daniela Morales y su esposo, Pablo Nelson Arroyave, una de las 10 familias que ganó, lamenta esta demora, pues todos los días los benefeciarios se tienen que turnar para vigilar el lugar y evitar invasiones. Por eso esperan una pronta respuesta de la Gobernación y de la Alcaldía, ya que los beneficiarios trabajaron en equipo y terminaron rápido la construcción, para que ahora les demoren tanto tiempo en entregar.

William López, otro beneficiario, destaca su interés de habitar pronto su hogar, aunque comprende los inconvenientes, por lo que asegura que "no hay otra que llenarse de paciencia. Espero que en un mes ya pueda mudarme a mi casa".

La explicación

El secretario de Vivienda del departamento, Javier Eduardo Torres, prometió que en abril entregarán las bloqueras. Dijo que el evento de diciembre fue solo el sorteo para conocer a qué beneficiario le correspondía cada propiedad.

Aseguró que dicho sorteo se hace para que las familias trabajen en equipo y haya más mano de obra. En en el evento también se definieron las familias que cuentan con personas que padecen alguna discapacidad para darles la casa. Señaló que el trámite de los servicios públicos es competencia de las familias y no de la Gobernación, pero que se les brinda asesoría para ese proceso.

Agregó que la demora es principalmente por falta de personal en las obras de las redes de acueducto, que competen a la Administración municipal, y que ya hay trabajadores adelantando esas obras. También defendió que el retraso se debe al certificado Retie, un documento que garantiza que el lugar es apto para la instalación de la energía eléctrica, y que una vez los obtengan se procederá a la conexión con la Chec.

Frenados en San José

La Gobernación y la Alcaldía de San José pretendían construir 31 bloqueras comunitarias, pero el proyecto se hundió en el Concejo, dado que los corporados consideraron que el predio seleccionado para construir el proyecto no contaba con todas las especificaciones para adelantar la construcción. El secretario de Vivienda de Caldas, Javier Eduardo Torres, dijo que desconoce las razones para que los concejales votaran negativo el proyecto, pues en su concepto el terreno cuenta con todos los requisitos técnicos y asegura que la Alcaldía demostró que es un suelo urbano.

Otra cosa piensa Julio César Betancur, presidente del Concejo, quien aseguró que 6 concejales votaron negativo y solo hubo 3 positivos, ya que el proyecto presenta vacíos. "La Secretaría de Vivienda nos da un certificado de uso del suelo de una matricula inmobiliaria que no pertenecía al municipio, tampoco se contaban con los permisos ambientales de Corpocaldas. Otra de las razones es que el alcalde solicitó el uso del suelo de todos los bienes inmuebles de San José y no puntualmente de ese lote". Betancur insistió en que el predio aparece en el Instituto Geográfico Agustín Codazzi como rural y por tanto no sirve para la construcción de esa urbanización.