LA PATRIA | CHINCHINÁ

El proyecto del Aeropuerto del Café tendrá que seguir esperando, por ahora no es su momento.

Por lo menos así lo planteó ayer el ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, durante su visita a Caldas para recorrer la Fábrica Buencafé Liofilizado de Colombia, el Centro Nacional de Investigaciones del Café (Cenicafé) y visitar la finca Quintalinda, en la vereda Miraflores del municipio de Villamaría.

A la pregunta puntual de LA PATRIA de qué va a pasar con este proyecto ante los recortes que planteó el Gobierno por cerca de $20 billones en el presupuesto del 2024, sostuvo que hay unas dificultades, debido a que no se cumplen las metas de recaudo y que por esta razón se están definiendo las prioridades en materia de inversión. "Sigue la discusión acerca del Aeropuerto del Café, está el aeropuerto de Pereira", planteó.

A la consulta de qué significa esto, y de si entonces no hay apoyo para la terminal de Caldas, indicó: "que no es el momento, tenemos que buscar mejores condiciones, hay otras discusiones, tenemos que mirarlo con el Ministerio de Transporte".

Aunque al proyecto le garantizaron recursos de $603 mil 662 millones y, de esa partida, el Gobierno comprometió de vigencias futuras, en la administración de Iván Duque, por un total de $518 mil 449 millones, el funcionario confirmó los temores de varios dirigentes y analistas económicos en el sentido de que también se restringen. "Lo que no se esté vinculando con crecimiento de obras civiles tenemos que determinar si se le aplica la caja o no", resaltó.

La visita

La visita fue promovida por la Federación Nacional de Cafeteros y la oficina de Asesores del Gobierno para Asuntos Cafeteros con el fin de que conociera lo que se conocen como los bienes públicos del sector, provenientes de los recursos de la contribución cafetera y del Fondo Nacional del Café. Lo anterior, ante las dudas que rondan en el Gobierno y sus continuas críticas sobre en qué se gastas los recursos del Fondo Nacional del Café.

Sin embargo, a la consulta de si quedó satisfecho con la visita y cómo están las relaciones entre Gobierno y Federacafé, insistió que la Federación Nacional es una parte importante de la cadena de valor del café, "pero no tiene todos los eslabones y construirla no quiere decir que se esté atentando contra la Federacafé", aseguró.

Las pérdidas

Dijo que nadie está cuestionando los recursos, pero que las cifras del Fondo Nacional del Café revelan que se han tenido pérdidas en los últimos años, ante el pasivo pensional que deben cubrir de la extinta Flota Mercante Gran Colombiana. "La pregunta es ¿lo tiene que cubrir el Fondo Nacional del Café", cuestionó,considerando que monto que debe asumir la Federacafé bordea los $60 mil millones y los debe pagar por una decisión judicial.

Aunque resaltó la visita e insistió que fue muy productivo en términos de comprender cómo se realiza el proceso de producción y de valor agregado del café colombiano, insistió que le quedan varios interrogantes ante la queja generalizada en la informalidad en las compras de café y cómo adquieren el grano los privados. Lo anterior, considerando que la Federacafé solo exporta entre el 20% y el 30% del café y es el porcentaje que compran las cooperativas legalmente.

¿Y las ayudas?

Sobre las ayudas para renovación, dijo que se tendrá que mirar con la nueva ministra de Agricultura qué recursos se tienen. Esos adicionales a los $50 mil millones que se habían anunciado este año, pero a través de créditos blandos como el Incentivo a la Capitalización Rural y Línea Especial de Crédito (LEC). Por ahora las únicas ayudas directas corresponden a los cerca de $27 mil millones que destinó la Federación Nacional de Cafeteros para siembra o zoca.

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