LA PATRIA | MANIZALES

"...en agosto del 2024 completamos un año de constante recuperación tomando el acumulado del año móvil, lo que refleja una reactivación agrícola y, por ende, un aporte significativo a la economía nacional al irrigar mas de $11 billones. El valor pagado al cafetero por una carga de 125 kilos ha mejorado un +35% (año corrido), lo cual en un cultivo de ciclos anuales permite balancear las cargas de los malos precios del 2023".

El comentario del gerente de la Federación de Cafeteros, Germán Bahamón Jaramillo, en su cuenta de X evidencia la satisfacción que hoy tiene el sector, producto del crecimiento de la cosecha este año, hasta llegar en los últimos 12 meses, a agosto, a los 12 millones 536 mil sacos de 60 kilos, indicador que no se veía desde el 2021.

Esto le permite resaltar al gerente que, pese a los retos de la variabilidad climática, el café nacional mantiene una tendencia de crecimiento, hecho que también se evidencia en lo corrido de este año.

Entre enero y agosto creció un 17,37% hasta llegar a los 8 millones 27 mil sacos y solo en agosto fue de 1 millón 49 mil sacos, un repunte del 20,29% frente al mismo mes del 2023.

Según las estimaciones del sector, incluso se espera que el año termine con un volumen que superará los 13 millones, similares a los datos reportados entre el 2015 y 2020, los más altos en 29 años.

¿Y el precio?

A la par con un mayor graneo, los cafeteros también resaltan la mejor calidad y el valor por carga de 125 kilos, cercanos a los $2 millones (ver recuadro: Repunte).

El impulso tiene que ver con los efectos de las heladas de Brasil, principal productor del mundo, aunque no fueron tan graves, como se esperaban. Sin embargo, el mercado también comienza a incluir y especular con las próximas olas de calor en esa nación y su impacto en los precios, en especial hacia el 2025.

El temor se debe al impacto en regiones como Paraná y algunas zonas de Minas Gerais, el estado de Brasil más productor de café arábigo o de mejor calidad, que además responde por el 35% del café en Brasil.

Eso sumado al impacto que se tendría en Vietnam, el segundo mayor productor mundial, que también tendría un descenso de hasta el 20%. Por ello se habla de floraciones prematuras y reducciones drásticas.

Ya está jugada

De acuerdo con el delegado por Caldas al Comité Nacional, Eugenio Vélez Uribe, estos aspectos considerados como los fundamentales del mercado se han mantenido y generan incertidumbre sobre la próxima cosecha, ante los déficit hídricos que se estiman en Brasil, motivo por el cual el mercado sigue nervioso por esta situación.

"Sin embargo, la situación no es ajena a Colombia donde hay zonas donde ya hay preocupación por un déficit hídrico, justo en este momento de mayor producción de café y por ende, se mantiene la preocupación", agregó.

Se suma la necesidad de la Unión Europea de adquirir café y estar mejor provisionada, antes de que se inicien las nuevas normas del llamado pacto verde o de Reglamento Europeo contra la Deforestación (European Deforestation Regulation (Eudr por sus siglas en inglés) que establece normas relativas a la introducción y comercialización en el mercado, así como a la exportación desde él.

La oferta en 2024

La estimación de la Federación de Cafeteros es que este año no habría mayores impactos en la producción, ya que la cosecha de Brasil se ha recogido en cerca del 95%, con un repunte alto de entre 65 millones y 68 millones de sacos. Ese volumen se sumará a la mejor oferta de los países productores, incluida Colombia, lo que permitirá una sobreoferta de café de unos 3 millones de sacos, por encima del consumo mundial. Es decir que mientras el consumo podría bordear los 172 millones de sacos, la oferta sería de hasta 175 millones de sacos de 60 kilos.

Repunte del precio

Ayer la carga de café alcanzó los $2 millones 67 mil, $114 mil más, un aumento del 5,8%.

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