Salud mental y bienestar socioemocional son dos desafíos que, de acuerdo con Juan David Galeano, psicólogo y enlace de Educación de Chinchiná, se atraviesan actualmente en las aulas de clase. 

El psicólogo manifiesta que cada día los estudiantes demandan y requieren más acompañamiento para atender las inquietudes y malestares que los afectan a nivel personal e institucional. 

Además, menciona que no solo se debe abordar la salud mental de los alumnos, sino también la de los docentes, que evidencia un deterioro progresivo. 

Así las cosas, Galeano reconoce un incremento en las cifras de ansiedad, depresión y estrés laboral en el sector educativo. 

“Nuestros docentes no tienen las herramientas psicosociales suficientes para atender la demanda que hay en temas de salud mental en los planteles escolares”, anota Galeano. 

El psicólogo manifiesta que el Servicio de Orientación Escolar es muy limitado, debido a que la capacidad instalada y los orientadores escolares en el departamento no dan respuesta oportuna a la población escolar con problemas y trastornos mentales. 

Medidas 

Conscientes de las necesidades y falencias, la Administración municipal de Manizales emprendió ‘Estamos contigo’. Es un programa que aunque se coordina desde la Secretaría de Salud, actúa con las secretarías de Educación, Medio Ambiente, Deportes, Interior y de la Mujer. 

El propósito del programa es ofrecerles a docentes, niños, niñas y jóvenes de Manizales atención en el sistema de salud frente a condiciones que afecten su estabilidad mental y, además, fortalecer los campos de deporte, arte y cultura.

"Estamos contigo" respalda la teoría de Juan David Galeano, quien expone que para hacerle frente a estos desafíos hay que articularse de manera intersectorial. “Son muchos los factores que influyen en el deterioro constante y progresivo de la salud mental en los ambientes escolares y que lastimosamente repercuten en la individualidad de cada estudiante”. 

Rutas

Andrés Felipe Betancourth López, secretario de Educación de Manizales, recuerda que hay rutas establecidas para casos de salud mental, una es la que cobija la Ley 1620, en donde se abordan situaciones de acoso general. 

Betancourth amplia: “Son rutas que se activan desde la institución educativa, sin embargo llevan la actuación Interinstitucional de la Secretaría de Salud y las EPS, que tienen responsabilidades vinculadas a la convivencia escolar”. 

Por otra parte, Galeano enuncia el desconocimiento y falta de contexto frente a la activación de la ruta de salud mental que se vive en algunas instituciones. 

“Piensan resolver los problemas que presentan los jóvenes, pero primero hay que caracterizarlos. También deben aprender a acompañar al estudiante en su situación (...), que permita garantizar un seguimiento individual y a partir de ello activar la ruta”, argumenta el psicólogo. 

Por tanto, Galeano concluye que las instituciones se están quedando en campañas de prevención, pero no están yendo más allá: hacer una articulación interinstitucional que permita responder de manera oportuna a los desafíos que se presentan al interior de los ambientes de deterioro de la salud mental, tanto en estudiantes como en docentes. 

¿A dónde llamar?

Las secretarías y enlaces de Educación tienen dispuesta una ruta de atención en la línea 123 para atender casos de crisis emocional, violencia intrafamiliar y dificultades socioemocionales en cualquier entorno. 

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