Alexander Álvarez, líder de la oficina Bienestar Universitario de la Universidad de Caldas

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Alexander Álvarez, líder de la oficina Bienestar Universitario de la Universidad de Caldas

 

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Alexander Álvarez, líder de la oficina Bienestar Universitario de la Universidad de Caldas, habló con LA PATRIA Radio sobre el proyecto de construir una nueva residencia universitaria para mujeres y su gestión. Esto dijo: 

¿Cuándo comenzará la construcción del nuevo edificio de residencias femeninas? ¿para cuántas mujeres es? 

Hace parte de un esfuerzo de la Universidad de Caldas y el Gobierno nacional por avanzar en este tipo de proyectos de bienestar universitario y poder llevar educación a quienes tradicionalmente no han podido llegar. 

Se va a estructurar un edificio a partir del año entrante. Ahí donde se encuentra el velódromo actual de la institución, al lado de nuestras actuales residencias masculinas, sería un edificio espejo con el mismo tamaño. 

La idea es poder crear allí 58 cupos nuevos de residencias universitarias. 

La Universidad de Caldas hoy es la única universidad de Colombia que está construyendo residencias universitarias. 

También estamos construyendo 320 residencias en La Dorada, en nuestra sede de Guarinocito, donde aspiramos también tener la sede para la construcción de paz del Magdalena Medio. Aspiramos también a tener todo un proyecto educativo muy importante. 

Esto fortalece también que haya más garantías para consolidarnos como ciudad universitaria. 

No es menor para la ciudad poder traer cada vez más estudiantes. Nosotros en la Universidad de Caldas tenemos un poco más de 5.000 estudiantes foráneos del centro sur del departamento y estas son personas que consumen y pagan arriendo en Manizales, compran alimento y generan una inversión de casi un millón de pesos per cápita por cada persona que está en la ciudad. 

Entonces el Producto Interno Bruto que se puede mover también alrededor de esta actividad es muy importante que hace que no solo sea un compromiso de universidad sino un compromiso de ciudad.

 

¿Cómo se va a garantizar que la residencia tenga buenas condiciones y sea un espacio seguro para las estudiantes? 

Estas residencias van a tener una mejor distribución de espacios que las que actualmente tenemos.

Las actuales tienen más de 40 años, se construyeron con unas normas de construcción distintas y tamaños de habitación distintos. Vamos a tener habitaciones más amplias, mejores zonas comunes.

Este es un proyecto que tiene un impacto no sólo en materia de infraestructura sino que también tiene todo un acompañamiento en materia social para las mujeres beneficiadas. 

En este tipo de alojamientos también se van a encontrar beneficiadas por el subsidio de alimentación de la Universidad. También tendrán  el acompañamiento del Grupo Especial de Equidad de Género y No Discriminación. 

La Universidad de Caldas es una de las primeras universidades en Colombia en tener aprobada una política de equidad y no discriminación. Tenemos personal contratado directamente para la implementación de la política. 

Las residencias son un lugar para dormir, pero son todo un programa extenso para transformar vidas, para poder traer personas que no tendrían otra manera de sostenerse en el sistema de educación superior y poder trabajar en la graduación oportuna de estas mujeres en este caso. 

Estamos levantando diferencias que puedan haber entre hombres y mujeres dentro de la institución de mano de la política. Desafortunadamente, las instituciones de educación aún vienen con muchos rezagos de toda la época de segregación que ha existido entre hombres y mujeres.

La segregación por regla general ha jugado en contra de las mujeres. Entonces hemos ido levantando barreras en materia de segregación que nos permitan decir cómo levantamos esas barreras y avanzar hacia acceso mixto y responder a las nuevas necesidades que tiene nuestra población. 

Estamos viendo diversidades sexuales, personas con todas unas características que tal vez no se recogen dentro de las categorías simples de hombre y mujer y la Universidad tiene que estar atenta y  participar en las necesidades de inclusión y diversidad que son tan importantes.

 

¿Cuál es la postura de la oficina de Bienestar de la Universidad frente a las denuncias de acoso dentro de la misma academia? ¿qué se está haciendo?

 

La universidad en estos momentos tiene aprobada su política de género y no discriminación, de equidad de género y no discriminación y lo que viene trabajando son tres líneas de acción. 

Una preventiva, otra de acompañamiento a las víctimas y otra correctiva con los presuntos victimarios. 

La postura de la institución es de cero tolerancia. 

Nosotros nos encontramos fortaleciendo el grupo de control interno disciplinario para poder estar en todas las últimas novedades en materia disciplinaria con enfoque de género que tiene todos unos retos de creencia y acompañamiento a la víctima correctivos y de no revictimización. 

Desafortunadamente nos movemos en un contexto donde hay unas violencias de género históricas, micromachismos, y una serie de acciones que nos corresponde ir transformando. 

El apoyo que se viene dando es total. Precisamente proyectos como los de las residencias femeninas, nos permite también marcar el rumbo, las prioridades. 

 

 Escuche la entrevista completa aquí:

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