Nora Quintanilla
EFE | LA PATRIA | Nueva York

La Met Gala, una de las fiestas benéficas más famosas del mundo de la moda, vuelve mañana a Nueva York con la promesa de recrear un "jardín del tiempo" habitado por unos anfitriones de lujo: Jennifer López (JLO), Bad Bunny, Zendaya y Chris Hemsworth.

Son los únicos nombres confirmados por el cerebro del evento, Anna Wintour, la influyente editora de la revista Vogue, que también dirige el Instituto de Moda del Museo Metropolitano (Met) y lo financia con este exclusivo "affaire" que requiere de su invitación y de un jugoso desembolso.

Los elegidos por Wintour se inspiran para vestir en la gran exposición anual de moda del Met: este año trata sobre las "bellas durmientes", vestidos históricos de extrema fragilidad, y, por si alguien necesita más inspiración, se ha sugerido 'El jardín del tiempo', un relato de 1962 de J.G. Ballard.

Esa obra es una distopía en la que dos aristócratas viven rodeados de belleza con el caos a sus puertas, una historia que puede resultar familiar a alguno de los 450 invitados que están en la cresta de la ola de sus carreras y dispuestos a pagar 75.000 dólares por la velada, según cifra la revista Time.

La lista de invitados es una incógnita hasta el último momento, cuando estos empiezan a desfilar por una alfombra desplegada sobre la escalinata del Met hacia una cena y una fiesta en la que no se permiten fotos, aunque siempre se acaba filtrando algún 'selfi' multitudinario en los aseos.

Zendaya, que epató en su última gala con un vestido de Cenicienta luminoso, quizás lleve a su novio, Tom Holland; mientras que lo más probable es que JLO, veterana del evento, pose sin su marido Ben Affleck, y que Chris Hemsworth sí lo haga con su esposa, la española Elsa Pataky.

No suele faltar alguna integrante del clan televisivo Kardashian-Jenner: las miradas están puestas en la reina de la osadía Kim Kardashian, recordada por enfundarse -y dañar- un vestido histórico de Marilyn Monroe, y en la modelo Kendall Jenner, por su ruptura con Bad Bunny.

De momento, ha confirmado su asistencia la cantante Rihanna, la más tardona y extravagante, pero asegura que optará por algo "simple" tras aparecer el año pasado envuelta en una corola de flores junto a su pareja, A$AP Rocky, padre de sus dos hijos pequeños.

Se esperan más parejas famosas -las apuestas están en Jeff Bezos y Lauren Sánchez, y Taylor Swift y Travis Kelce-; figuras del cine, la música, el deporte, los negocios y el entretenimiento; y diseñadores de moda, que suelen vestir y acompañar a sus musas.

La Met Gala, fundada en 1948, ha intentado modernizarse al compás de la sociedad y cada vez invita a más ídolos de la Generación Z (nacidos en torno a 2000-2010) y personajes de la era de internet, como el magnate Elon Musk, que acudió hace dos años con su madre, Maye.

Este año es presidente honorario de la gala el consejero delegado de TikTok, Shou Chew, ya que su empresa, bien posicionada en el mundo de la moda, patrocina el evento -con ayuda secundaria de Loewe y Condé Nast- en un momento en que EE.UU. busca vetar la red social en el país.