Fotos | Luis Fernando Trejos | LA PATRIA
El torero peruano Andrés Roca Rey salió en hombros ayer de la Plaza de Toros de Manizales luego de cortar las dos orejas del toro Perdicero, de 456 kilos, de la ganadería de Ernesto Gutiérrez.
PREGONERO | LA PATRIA
Andrés Roca Rey volvió a embestir y se llevó, aparte del mano a mano, el agradecimiento de una plaza llena que no se fue con las manos vacías.
La tarde de cierre de la Feria no tocó el techo con un cartel hecho para soñar y triunfar. En gran parte, porque, casi sin excepción, los toros de Ernesto Gutiérrez Arango anduvieron bien distantes de la categoría de sus ancestros.
En realidad, la tarde se dividió en dos. Una, hecha con los dos primeros toros, muy en el tipo de la ganadería y que, sin ser notables, permitieron a El Juli y a Roca Rey estar entonados con toreo de mano baja y repetición para ligar.
El Juli pudo entrar ahí con pie derecho. Todo fluyó a favor y a su propuesta de temple y pulcritud supo responder el toro. Pero la espada no hizo pronto efecto y la oreja en camino se evaporó.
Y el de Roca, chico y protestado, tuvo algunos ratos de nobleza pero era más manso que otra cosa. El peruano intentó cerrarle la puerta para que no huyera y lo consiguió. En la memoria quedaron los estatuarios que levantaron a la gente en los tendidos. Oreja.
Y vino esa segunda parte, con toros de más cara y menos fondo. Aunque, por ejemplo, el tercero pudo significar al menos un trofeo para El Juli, pero la espada, otra vez la espada, se lo negó.
Del cuarto, para Andrés - violento y siempre a la defensiva - y del quinto, para El Juli- aplomado- hay poco que decir, aparte de eso. O sí, que se fueron entre pitos.
Quedaba ese sexto, con un torero decidido a no irse a pie del ruedo. Roca tocó todos los palos posibles a ver si encontraba respuesta en la gente y la fue hallando poco a poco. Eso sí, nunca lo suficientemente honda sino más bien emotiva, hasta crear el ambiente de triunfo, tan esquivo hasta ese momento. El espadazo fulminante hizo el resto y los dos pañuelos asomaron para reconfirmar una puerta grande que sirvió de bálsamo.
Ficha de la corrida
Toros de Ernesto Gutiérrez Arango . Desiguales de presentación. El segundo chico y protestado. Palmas al noble primero y pitos a los descastados cuarto y quinto.
Julián López 'El Juli': saludo, palmas y pitos.
Andrés Roca Rey: oreja, palmas y dos orejas.
Detalles: plaza casi llena. Tarde con ráfagas de lluvia.
“El Juli” corre su mano derecha, durante la última corrida de la temporada para acompasar un derechazo al toro Habanero de la ganadería de Ernesto Gutiérrez.
Roca Rey ejecuta en la tarde de ayer, un precioso natural a su toro en suerte Centellita de la ganadería Ernesto Gutiérrez.