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Alias Tenedor, en la acusación de la Fiscalía.
LA PATRIA | MANIZALES
Alias Tenedor, de 29 años, natural de Manzanares (Caldas), se enfrenta a los delitos de secuestro extorsivo agravado, lesiones personales, hurto calificado y agravado tentado, y porte ilegal de armas de fuego.
Su posible víctima fue un adulto mayor. La semana pasada fue la acusación y su abogado planteó una nulidad, pues consideró que no se definen los hechos jurídicamente relevantes, como el secuestro extorsivo. Pese a eso, el juez avaló lo narrado por el ente acusador y ahora se espera la audiencia preparatoria.
Entre las pruebas que nombró la Fiscalía se evidencia que, al parecer, desde su celular, Tenedor conversó con varias personas previo a los hechos, contactó a una dama para sonsacar a la víctima y "se hicieron negociaciones de armas de fuego, incluso con integrantes de la Policía".
Los hechos, paso a paso
- El 6 de marzo pasado, Orlando Gallego Jiménez salió a las 8.30 de la mañana a su caminata matutina. Lo abordó una mujer, que le dijo que si le permitía acompañarlo. Accedió.
- Tomaron la ruta desde la estación de servicio Cootramán, pasaron por el puente y salieron a La Tolva. Cuando se iban a devolver, la dama le indicó que si iban hasta la entrada al restaurante El Edén, al frente de una puerta de rejas.
- Allí descansaron un momento y cuando iba a regresar fue abordado y retenido por varios sujetos que viajaban en un carro rojo. Lo amenazaron con arma de fuego y lo llevaron hasta una casa abandonada de la vereda Santa Bárbara, donde le quitaron las pertenencias, las llaves de la casa y lo amordazaron.
- Los familiares, en el municipio, lo buscaban para celebrarle el cumpleaños. Lo llamaron, pero no contestó. Le avisaron a la Policía.
- Fueron a la casa y al entrar se encontraron con un desconocido (el hoy investigado), quien los amenazó con un arma de fuego. Se guardó $8 millones 858 mil y otras pertenencias. Este les había advertido a los familiares que debían indicar que era allegado a ellos y que si no entregaban todo, no volverían a ver a la víctima.
- El hijo de Orlando ya les había alertado a los uniformados, quienes llegaron al lugar y sorprendieron al sujeto.
- Sin embargo, intentó huir por detrás de la vivienda, pero al no lograrlo, regresó y dejó en un armario una bolsa de tela amarilla, donde llevaba la plata, las pertenencias hurtadas y el arma de fuego. Los uniformados lo aprehendieron en flagrancia.
- Mientras tanto, el afectado logró desamarrarse y pedir ayuda en casas vecinas de esa vereda. Lo recogieron, lo llevaron a centro asistencial y narró los hechos ante las autoridades.