Condena por actos sexuales con menor de 14 años en concurso homogéneo y sucesivo, y absolución por acceso carnal violento con menor, le dieron a Juan David Lema Cardona, de 32 años, natural de Apartadó (Antioquia), por un caso ocurrido en Aguadas.

Los hechos fueron entre el 10 de marzo y el 9 de julio del 2021, en el Alto de la Virgen, de ese municipio del norte de Caldas. El sujeto acudía constantemente a la vivienda de la víctima, una menor, de 11 años, pues era allegado a su familia.

El juez, que lo condenó a 14 años y 3 meses de cárcel, expresó que una cosa es que se que toque a una menor y otra que se planee el acto sexual, que se arme todo ganándose la confianza de la afectada, mostrándose como un buen samaritano, llevándola al colegio y recogiéndola, invitándola a pasear a municipios vecinos y a otros departamentos.

Lo hizo para asentir sus apetencias sexuales, para que ella se dejara tocar, demostró que todo fue premeditado y el dolo no surgió intempestivamente, añadió. Incluso, la hacía faltar al colegio para permanecer con él.

Paseo

En la acusación se contó que Lema Cardona le practicó vejámenes a la niña y le exhibió sus partes íntimas. Se llevó a la menor y a la mamá a pasear a su casa en la capital de Antioquia y logró que la afectada se pasara para su lecho con el fin de tocarla indebidamente. Luego las invitó para Coveñas, con todo pago. Se dijo que la habría accedido, pero ese delito no se logró demostrar, pues un testigo aseguró que el señalado le contó que sí la había manoseado, pero que no abusó de ella "porque no quería hacerle daño".

El juez llamó la atención de que existió una total desatención de la mamá de la menor, que permitió que el hoy condenado se la llevara para otra ciudad, la transportara y la trajera de la escuela. Por eso cumpulsó copias para que se investigue a la señora por esos actos.

El abogado del sujeto apelará de la decisión, por escrito, ante el Tribunal Superior de Manizales, lo que quiere decir que la sentencia aún no está en firme.

Factores de riesgo

Los expertos coinciden en señalar algunos factores que incrementan el riesgo.

• La falta de educación sexual desde temprana edad, que impide que los niños aprendan a identificar los riesgos a los que están expuestos y que, por ende, no desarrollan acciones de autocuidado y establezcan límites con relación a las manifestaciones de afecto.
• La inobservancia o la negligencia de madres, padres o cuidadores a la hora de crear entornos protectores. Asimismo, el dejar solos a los niños por mucho tiempo.
• La debilidad o carencia de vínculos afectivos entre los menores de edad y sus adultos significativos. Los agresores aprovechan este desequilibrio para llenar vacíos emocionales.
• La violencia intrafamiliar y el maltrato físico, verbal o psicológico, que lesiona su autoestima y su seguridad, haciéndolos más propensos a ser víctimas de este delito.