LA PATRIA| MANIZALES

Este es el comentario en redes sociales que le enredó la vida a Alejandro, apodado Colacho, de 22 años, seguidor del Once Caldas, natural de Villamaría, procesado por el delito de amenazas (4 a 8 años de cárcel) y capturado el jueves en Ondas de Otún: "Pirobo, veo a Tulio y lo apuñalo, ja, ja, ja". La publicación intimidante es de mediados del año pasado.

Lo llevaron a audiencia de control de garantías, no aceptó cargos, tampoco le dieron medida de aseguramiento, pero sí le notificaron algunas prohibiciones.

En la diligencia ante el Juzgado Segundo Penal Municipal con Función de Control de Garantías de la capital caldense, el ente acusador contó que el caso es del 28 de junio del 2022, a las 16:23 de la tarde.

"Usted, Alejandro, amenazó a Tulio Mario Castrillón Tobón, presidente de la Organización Deportiva Once Caldas, a través de la cuenta de Facebook del equipo. Las expresiones intimidantes ocasionaron alarma, zozobra y terror en el directivo, su círculo familiar y personas cercanas a su entorno laboral", expresó el fiscal. Le indicaron que si se allanaba, la pena quedaba en 24 meses. No aceptó.

Desde atrás

En la audiencia se conoció que las situaciones han sido continuas y sistemáticas. Se habló de que el 8 de marzo del 2021 el directivo había formulado denuncias por serias amenazas contra su vida, su familia y quienes integran el equipo.

Por eso se entrevistó al jefe de prensa para obtener pantallazos de los mensajes que escribían a las cuentas del club. Muchos están relacionados con la inconformidad de los barristas por la actuación del blanco..

"Varios mensajes no solo se dirigen a directivos, sino que involucran el invitar a la sociedad a que no aguante más lo que pasa, sobre todo con el señor Tulio. En otros hacen referencia a Pineda, un socio. Los llamados convocan a reunirse en determinados lugares, días y horas para expresar la insatisfacción, incluso, con pancartas. Decían: 'Sí pierden, que no entren a Manizales', 'Cuándo es la toma de la sede', 'Los peores directivos, fuera ratas', 'Hay que ir a las casas de ellos o donde duerman esas porquerías, porque viven en Medellín', "De algún modo le entramos a Pineda y sus mulitas'", citó el ente acusador.

Hizo referencia a que, durante esta investigación, un periodista de radio le envió un mensaje a Tulio Mario donde le expresó que le parecían muy graves todas esas amenazas, que había que hacer un llamado a la tolerancia y que le ofrecía sus micrófonos para que lo hiciera.

Cementerio

"Si nos llevan a la B, los llevamos al cementerio", fue otro mensaje que preocupó a la autoridades. La pancarta se habría ubicado en San Rafael. Con base en eso, se ordenó a Policía Judicial buscar los nombres de quienes lo escribieron.

El siguiente paso fue ubicar a algunos dirigentes de las diferentes barras. Uno explicó que las pancartas hacían parte de la protesta pacífica por la situación del Once, pero sin agresiones. Expresó que situaron 30 en toda la ciudad y que se convocó a los hinchas para hacerles ver a los directivos el inconformismo. Sobre el mensaje (Si nos llevan a la B...), dijo desconocer su origen, pero expresó que "hay barras que solo quieren ver lo malo y que hay una ilegal, conformada por personas que no son recibidas en las demás por producir miedo y zozobra". Nombró a Yeison, Papo, Chucho, Sebastián, entre otros.

Se consiguieron declaraciones de aficionados que indicaron que eran llevados a esas protestas para transportar gasolina, llantas, pero no para vandalismo; además de comunicaciones entre barras donde establecen efectivamente que están es contra del manejo administrativo del club, no del equipo.

Proyectil

El 22 de mayo del 2022, Tulio Mario informó de más amenazas, donde le decían que lo mandarán al hospital, que se cuide, que le han tenido mucha paciencia. También habló de que atacaron su vehículo blindado, al parecer, con un proyectil y/o un objeto contundente.

El 7 de junio de ese año amplió denuncia porque le escribieron que si se lo encontraban en la calle, lo apuñalaban. Él le atribuyó eso a las barras y "a algunos periodistas del fútbol, que incitan a los oyentes en su contra". Se le solicitó protección a la UNP.

Por medio de ciberpatrullaje y búsqueda en fuentes abiertas, a través de un servidor, dieron con Colacho, quien el fin de semana quedó libre, vinculado al proceso, pero deberá cumplir medidas no restrictivas de la libertad: No acercarse ni ingresar al estadio Palogrande, permanecer lejos de la víctima y atender los llamados de la justicia cuando lo requiera.

La búsqueda de los otros intimidadores continuaría.

Libertad de expresión

En el 2019, la Corte Constitucional indicó sobre la libertad de expresión en redes sociales:

1. "No hay una regla universal que aplique para todas las situaciones por lo que cuando un ciudadano interponga una tutela en la que estén en tensión los derechos a la libertad de expresión en redes sociales, por un lado, y la honra, dignidad y buen nombre, por el otro, los jueces deben evaluar caso a caso las circunstancias de cada proceso".

2. "No están protegidos por el derecho a la libertad de expresión los discursos discriminatorios, la incitación al genocidio, la pornografía infantil, la propaganda de guerra, o la apología del odio que incite a la violencia".

3. "Los funcionarios y figuras públicas tienen el deber de soportar mayores cuestionamientos en las redes sociales. ya que esas opiniones hacen parte de la función de veeduría que tiene la ciudadanía".