En 1999 LA PATRIA informó sobre un crimen del Ejército Revolucionario Guevarista en Caldas.

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En 1999 LA PATRIA informó sobre un crimen del Ejército Revolucionario Guevarista en Caldas.

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LA PATRIA | MANIZALES

La próxima semana saldrá a la luz pública el informe Jaūriperabu o la enfermedad del susto: así actuó el Ejército Revolucionario Guevarista (ERG), un documento del Centro Nacional de Memoria Histórica (CNMH), en cumplimiento de una sentencia del Tribunal Superior de Medellín, que exige esclarecimiento de la verdad.

"Jaūriperabu, la enfermedad del susto, es un término embera que refleja el daño causado por el conflicto armado".

El ERG surgió en 1993 como una disidencia del Eln, a raíz de factores como la muerte del comandante del Frente Ernesto Che Guevara, alias Juan Camilo; las diferencias político-militares con el Eln y el desacuerdo con el manejo de las finanzas. Según Justicia y Paz, 171 integrantes eran menores de edad.

La desmovilización colectiva fue el 21 de agosto de 2008, en la vereda Guaduas de El Carmen de Atrato (Chocó).

Ese grupo tuvo incidencia en Caldas. Hoy le contamos detalles de este informe.

Inicio

El 18 de octubre de 1993, en Lanas, cabecera del río Carpas de El Carmen de Atrato (Chocó), Olimpo de Jesús Sánchez Caro, alias Cristóbal, gestó un movimiento separatista y fundó un nuevo grupo insurgente que en principio se autodenominó Compañía Guevarista, pero que posteriormente tomó el nombre de Ejército Revolucionario Guevarista. La nueva estructura guerrillera inició con 16 fusiles y algunas armas cortas, comenzó un proceso de expansión en la región, llegando a establecerse en Chocó, Antioquia, Valle del Cauca, Risaralda, Caldas y Tolima.

Influencia

  • En casi 15 años, el ERG logró ejercer algún tipo de influencia en 24 municipios de seis departamentos: Antioquia, Caldas, Tolima, Valle del Cauca y, especialmente, en Chocó y Risaralda.
  • Los únicos municipios en los cuales su presencia fue prácticamente permanente y ejerció algún tipo de control territorial y regulación social fueron Pueblo Rico (Risaralda), en especial en zona rural del corregimiento de Santa Cecilia; y El Carmen de Atrato (Chocó), sobre todo en las veredas Guaduas y El Siete; y en las comunidades indígenas de Sabaleta, El Doce - Quebrada Borbollón y La Puria. Además, controlaron, junto con las Farc-EP y el Eln, las carreteras Medellín - Quibdó y Pereira -Tadó.

Expansión

En un primer momento, luego de su creación en Lloró, el ERG se dirigió hacia Risaralda y, tiempo después, hacia la frontera entre los departamentos de Chocó y Antioquia, que era la zona de influencia del Frente Ernesto Guevara.

Por su parte, el ERG tomó como área estratégica, desde el punto de vista de vanguardia y retaguardia, los límites de Antioquia, Chocó y Risaralda, con injerencia en 10 municipios. A partir de 1996, el grupo extendió su influencia a Valle del Cauca, Tolima y Caldas.

Sin embargo, su presencia en estos fue más bien esporádica y se limitó a algunos municipios concretos, los cuales no variaron desde 1999 hasta el momento de su desmovilización en el 2008.

Por departamentos

  • Chocó. Quibdó, El Carmen de Atrato, Lloró, Bagadó, Tadó, Condoto, San José del Palmar y Nóvita.
  • Antioquia: Ciudad Bolívar, Betania, Andes, Jardín y Pueblo Rico.
  • Risaralda: Mistrató, Pueblo Rico, Belén de Umbría, Santuario.
  • Tolima: Fresno.
  • Caldas: Manzanares, Anserma, Samaná, Viterbo, Riosucio.

Lo de Caldas

  • Manzanares. El 9 de abril de 1999, por información que obtuvieron de un colaborador de la organización conocido con el alias de Gersan, ocho guerrilleros secuestraron a Carlos Humberto Murillo Osorio y le exigieron a la mamá $1.500 millones por su liberación, so pena de muerte. Logró bajarla a $800 millones, pero el dinero nunca fue entregado. Ante el asedio del Ejército, y debido a las políticas del grupo de no dejar rescatar a los secuestrados con vida, lo asesinaron y ocultaron su cuerpo en inmediaciones de la vereda Raizal, de Fresno (Tolima), el 11 de diciembre de ese año. 20 días después el cuerpo fue encontrado. Fue la única intervención, no volvieron.
  • Anserma. Trabajo político-organizativo, ampliación de zona, extorsiones.
  • Samaná. Un retén y les hurtaron las armas a unos policías. Solo se ejecutó ese hecho allí.
  • Viterbo. En 1999 secuestraron a Luis Bernardo Patiño Ramírez, padre de Carlos Arturo Patiño Restrepo, alias Pate Muro (foto), narcotraficante de ese municipio, extraditado a Estados Unidos en el 2007. A raíz de esta situación, 'Pate Muro' solicitó el apoyo a las Auc y se reunió con Ever Veloza, alias H.H., en el aeropuerto Matecaña de Pereira, para rescatar a su padre, pues no estaba dispuesto a pagar por su liberación. En noviembre de ese año, dos hombres de civil llegaron a la zona de ese grupo a hablar con alias Romaña y se identificaron como de las Auc. Indicaron que iban a averiguar por el secuestrado. 'Romaña' los retuvo y se los entregó a alias Jhon Jairo, mando de esa guerrilla en la zona. Dio la orden de matarlos e inhumarlos. El 15 de noviembre de 1999 secuestraron a 'Pate Muro', entre 15 hombres. Lo retuvieron por 45 días, tras pagar recompensa. No hubo presencia estable, solo incursionaron para este plagio.
  • Riosucio. Veredas Arroyo Hondo, La Peña, San Lorenzo, trabajo político.
  • Dos supieños, Angélica Cifuentes de Sánchez y Gustavo Adolfo Sánchez Cifuentes, fueron desplazados por este grupo, desde la vereda El Siete, de El Carmen de Atrato, donde vivían.

Conformación

La agrupación llegó a tener 413 integrantes, entre combatientes y colaboradores, divididos en cinco comisiones denominadas Conquistadores, Los Libertadores, Héroes de Belén, Los Patriotas y Los Vencedores.

Sin embargo, por los continuos ataques de las Fuerzas Militares, las deserciones, los enfrentamientos con algunas facciones del mismo Eln y las Farc, que se disputaban el territorio, se redujo para la época de la desmovilización a 50 combatientes efectivos.

Las cifras aproximadas aportadas por quien fungió como máximo comandante dan cuenta de 136 mujeres y 277 hombres que ingresaron a la organización (170 menores de edad).

Postulados

En diciembre del 2015, el Tribunal Superior de Medellín, Sala de Justicia y Paz, falló en el proceso para 20 postulados del Ejército Revolucionario Guevarista y el Frente Ernesto 'Che' Guevara del Eln. Decidió:

8 años para:

Postulado Número de delitos
Olimpo de Jesús Sánchez Caro, alias Cristóbal 479
Martín Alonso Arenas Vásquez, alias Wilson 98
Beatriz Elena Arenas Vásquez, alias Sandra 120
Lisardo Caro, alias Romaña 64
Efraín de Jesús Sánchez Caro, alias Juan Pablo 64
Efraín de Jesús Sánchez Caro, alias Édison o México 65
Francisco Antonio Salazar Hinestroza, alias Jhon Jairo 410
Édison Maturana Mosquera, alias Corinto 77
Claribel Mosquera Palacios, alias Kelly 50
María Rosmery Suárez Álvarez, alias Carolina 50

7 años para:

Postulado Número de delitos
Octavio de Jesús Sánchez Caro, alias Franco 42
Ladys Tiser Eusse Flórez, alias Yesenia 38
Franklin Elí Mosquera Sánchez, alias Iván 41
Aníbal Duave Valencia, alias Gustavo 39
Gloria Nancy Suárez Álvarez, alias Katerine 24
Bibiana María Suárez Álvarez, alias Mónica 43
Bander Yaved Caro Sánchez, alias Paraco 37

11 conclusiones del informe

  1. El ERG surgió en el contexto de una serie de conflictos internos del Eln en la década de los noventa, que derivaron en varias disidencia.
  2. Su creación se justificó en la muerte del comandante del Frente Ernesto Che Guevara, alias Camilo, que permitió la emergencia de diferencias entre mandos medios; la intención de priorizar el aspecto militar sobre el político y las negociaciones de paz, aunque nunca alcanzó la capacidad militar del Eln y terminó sometiéndose a la justicia; y el objetivo de no compartir las finanzas.
  3. Fue una pequeña guerrilla en comparación con otros grupos insurgentes, que operó durante 15 años en una zona de alta conflictividad, lo cual fue posible tanto por los recursos económicos obtenidos por el secuestro, la extorsión y el hurto de mercancías en las vías, como por la permisividad y apoyo que tuvo de las Farc y el Eln.
  4. Tuvo una fuerte identidad de clan y composición endógena, dado que muchos de sus integrantes fueron familiares del comandante, así como naturales, principalmente, de Guaduas, pero también de comunidades indígenas y afrodescendientes de los territorios en los que operó.
  5. Se financió por el secuestro, la extorsión, el narcotráfico y el hurto. Las dos primeras fueron las más importantes y la razón de la expansión de este grupo al suroeste antioqueño, al norte del Valle, norte de Tolima y Caldas. El narcotráfico, aunque minimizado por sus exintegrantes, pudo haber constituido una importante fuente de financiación de acuerdo con el Tribunal Superior de Medellín. Los hurtos generalizados en las vías de Quibdó hacia Medellín y Pereira permitieron la manutención cotidiana de la tropa.
  6. Entre 1993 y el 2002 tuvo un período de auge y expansión, durante el cual realizaron sus principales actos delictivos como las tomas a Bagadó en 1997 y el 2000; los secuestros de un integrante de Médicos Sin Fronteras y de la tripulación de un helicóptero; y los desplazamientos forzados masivos de Guaduas, Sabaleta, El Doce - Quebrada Borbollón y La Puria, entre otros.
  7. Entre el 2002 y el 2008 inició un proceso acelerado de declive por tres causas principales: El cambio en la relación con las otras guerrillas, que pasó de la permisividad y el apoyo a la hostilidad; el aumento de la ofensiva de la fuerza pública; y la rígida disciplina interna de la organización, que derivó en múltiples ejecuciones de sus propios integrantes, a la vez que justificaron las deserciones masivas, motivadas, además, por el programa de reintegración del Gobierno. Más que un sometimiento a la justicia, fue una rendición. Tenían tres opciones: hacer parte de otras guerrillas, aceptar la propuesta de compra del grupo posdesmovilización del Clan del Golfo o desmovilizarse en la Ley de Justicia y Paz.
  8. Entre sus principales patrones de macrocriminalidad tuvo el homicidio, la desaparición forzada, el desplazamiento forzado, el reclutamiento ilícito, el secuestro y la violencia sexual. Una misma persona pudo ser víctima de secuestro, homicidio, desaparición forzada y sus familiares desplazados; o una misma mujer soportar el reclutamiento ilegal, tres tipos diferentes de violencia sexual, homicidio y desaparición forzada.
  9. Asesinaron a civiles que se oponían públicamente al accionar de esta guerrilla o que fueron acusados falsamente de informantes; así como asesinados y desaparecidos víctimas de secuestro, pese a que sus familiares habían pagado la extorsión. Militares, policías y presuntos paramilitares, sin prueba alguna de que lo fueran, capturados en retenes ilegales, asesinados de civil, desarmados y en estado de indefensión, y posteriormente desaparecidos. En ataques a poblaciones usaron cilindros bomba. No obstante, fueron sus propios integrantes las mayores víctimas de homicidio y desaparición forzada. Pedían extorsiones entre $5 millones y $1.500 millones, presentándose en ocasiones el intercambio de unos rehenes por otros o la exigencia de varios pagos, incluso cuando las víctimas ya habían sido asesinadas. Se presentó un caso de esclavitud, en el que una mujer fue secuestrada durante meses para la realización de un trabajo para esta guerrilla.
  10. Reclutaron a menores entre los 12 y 17 años, usando motivaciones de los adolescentes como la violencia intrafamiliar, la búsqueda de amigos y familiares y el gusto por las armas. Los principales mecanismos de reclutamiento fueron el proselitismo en reuniones en la comunidad, el engaño bajo ofrecimientos nunca cumplidos, el establecimiento de relaciones afectivas y la coerción.
  11. Las guerrilleras fueron víctimas de planificación forzada con pastillas, remedios nativos y uso de dispositivos. Una parte importante estuvo obligada a abortar con pastillas, remedios nativos y legrados con intervenciones quirúrgicas en condiciones insalubres y sin derecho a posoperatorio, pues eran castigadas por haber quedado embarazadas. Algunas abortaron hasta cinco veces y, en algunos casos, después del séptimo mes de gestación. Muchas de estas mujeres soportaron abusos sexuales por convivencias forzadas, tocamientos forzados y acceso carnal violento.

Algunos integrantes.