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LA PATRIA | MANIZALES
Sigue la racha de muerte en Manizales. Asesinaron de nuevo con arma de fuego y esta vez en la modalidad de sicariato. En la noche del martes acabaron con la vida de Jeison Alejandro Delgado Valencia, de 29 años, en la calle 21, entre carreras 25 y 26, del barrio San Joaquín.
"Sobre las 8:00 de la noche un ciudadano dio aviso a la central de radio manifestando que habían lesionado a un familiar. De inmediato se dirigieron unidades al lugar indicado, donde se entrevistaron con los familiares de la víctima, quienes manifestaron que este había sido herido presuntamente con arma de fuego y que luego murió", contó ayer la Policía Metropolitana en un comunicado.
A él lo atacaron dos sicarios en moto. Manizales ajustó así siete homicidios este año, pues uno, el de Iván Ramiro Bernal Quintero, natural de Bogotá, de 23 años, hallado con ocho puñaladas en la bocatoma de Sancancio el pasado 6 de abril, fue en territorio de esta capital y no de Villamaría, como se indicó inicialmente mediante georreferenciación. Esto lo confirmó la Policía Metropolitana.
El crimen más reciente en nuestra capital ocurrió en Persia, donde hallaron en zona boscosa el cuerpo de Miguel Antonio Montoya Guapacha, de Villamaría, con 46 años y ayudante de construcción. Tenía un disparo en la cabeza e intentaron calcinarlo.
Villamaría, sin homicidios
Aunque el vecino municipio figuraba con dos homicidios este año (uno confirmado, el de la bocatoma; y el otro en análisis, bebé de 18 meses), se determinó que una de esas muertes atribuidas a ese territorio fue en Manizales.
El secretario de Gobierno, Jhon Édison Giraldo, expresó que el cuerpo hallado en la bocatoma pertenecía en forma administrativa y jurisdiccional a la capital caldense.
"Lo mismo en el caso que se tuvo de un menor de edad, aparentemente un homicidio por un familiar muy cercano. Según la información, cuando el bebé salió de Villamaría estaba vivo", contó el funcionario.
Hay que recordar que se descubrió la muerte del infante en el barrio Villahermosa, cuando la mamá lo llevaba sin vida dentro de una canasta, con unas ramas.
A propósito de este misterioso caso, LA PATRIA conoció que el martes, en la reciente reunión de las autoridades con la Fiscalía, se determinó que no se manejará como un homicidio, sino como un deceso posiblemente accidental o fortuito. Al parecer, las marcas que tenía el niño en su abdomen fueron causadas cuando trataron de reanimarlo.
En el rostro
Manizales. A un hospital de la ciudad remitieron desde el barrio El Carmen a Jhónatan Alejandro Escudero Quintero, de 33 años, quien recibió un disparo en el lado derecho del rostro. Entró por un lado de la oreja y salió por la mandíbula, no compromete su vida. No registra antecedentes.