Piden ayuda de autoridades ante presencia de tres pumas en zona rural de Villamaría

Foto | Cortesía | LA PATRIA

En estos potreros se han reportado las muertes del ganado.

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La vereda Montaño, de Villamaría, se convirtió en un apetecido espacio para caminantes, ciclistas y visitantes del río, además de ser una zona ganadera y de promoción turística.

Hoy, los propietarios de las fincas hacen un llamado de atención a las autoridades para que actúen ante la presencia de una hembra de puma y dos cachorros que, al parecer, mataron unas 45 ovejas, terneros y potros. Y eso, haciendo cuentas optimistas porque creen que pueden ser más.

Aunque algunos ya se resignaron con la pérdida de sus rebaños, como es el caso de Ferney Martínez Amador, propietario de la finca Planes, les preocupa que los tres pumas resulten envenenados, tal como advirtió otra persona, o que ataquen a un habitante o visitante.

Este administrador de empresas agropecuarias quiso emprender con la cría de camuros, una especie ovina africana rica en carne libre de colesterol, pero perdió todos los ejemplares. En octubre empezó a notar que se desaparecían los animales y se llegó a pensar que se trataba de cuatreros, pero días después empezaron a encontrar las osamentas en un bosque cercano.

El problema fue también para otros propietarios e incluso le envenenaron dos perros pastores porque alguien pensó que podrían ser estos los causantes de los daños. Aunque denunció el hecho, no hubo a quién investigar.

 

Soluciones fallidas

A medida que se fueron perdiendo más animales, los finqueros optaron por ponerles cencerros a los que quedaban y la solución tampoco funcionó. Luego los pusieron a pastar más cerca de las casas y fue otro intento fallido. Analizaron la posibilidad de lanzar pólvora, pero recientemente se recuperó un humedal al que llegan incluso aves migratorias y lo descartaron.

Los propietarios son conscientes de la necesidad de proteger los pumas, que están en riego de extinción. Ninguna estrategia funciona y se sienten abandonados por las autoridades. Martínez Amador cuenta con terneras normando que ya deberían estar pastando y no tuvo más de otra que mantenerlas en un recinto cerrado.

Empleados de las fincas han estado haciendo seguimientos y pudieron ver a la hembra y sus cachorros que se esconden posiblemente en un bosque cercano que es de reserva, en cuyos alrededores han hallado la mayoría de cadáveres de los animales extraviados.

"Lastimosamente tienen que pasar dos cosas para que nos pongan atención: que los pumas ataquen a alguien y ahí se pondrán las pilas a dar información, divulgación y señalización. La otra es que un sinvergüenza los va a matar y saldrán a culpar a los ganaderos porque nadie entiende qué significa perder 45 cabezas y dirán que para eso tenemos y podemos recuperarlo", dijo Ferney.

 

¿Qué dicen las autoridades?

Óscar Ospina, profesional especializado en Fauna Silvestre de Corpocaldas, indicó que en distintas ocasiones se han realizado campañas con los propietarios y ayer se efectuó nuevamente un recorrido con la Policía Ambiental.

También se intentó dialogar con la Alcaldía de Villamaría, pero al cierre de esta edición, no se obtuvo respuesta.

 

Casos recientes

  •  En diciembre del 2017 se avistó un puma en un parque de La Enea. Al animal lo capturaron y lo liberaron en una zona de reserva.
  • En noviembre del 2021, un puma llegó hasta un conjunto cerrado cerca de Expoferias. Al parecer, su presencia se debió a la cercanía con sus corredores biológicos.
  • En mayo del 2023, campesinos de Salamina reportaron la muerte de animales causada por un puma. Atacó cabras y un potro.

 

Recomendaciones ante la presencia de pumas

  • Los felinos silvestres son animales que actúan normalmente de noche, se aconseja instalar luces intermitentes y elementos que generen ruido con el viento para ahuyentarlos.
  • Ponerles cencerros o campanas al ganado.
  • Tener a los animales vulnerables (caprinos, ovinos y reses de tamaño pequeño) cerca de las casas. Evitar dejarlos en los potreros lejanos y cerca de zonas boscosas.
  • Procurar que las viviendas estén ocupadas.
  • Utilizar cercas eléctricas con al menos cuerdas.
  • No permitir que los animales domésticos accedan a las corrientes de agua.

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