Foto | LA PATRIA El crimen fue en El Guamal.
LA PATRIA | MANIZALES
Demostrar que su cliente es inimputable, es decir que no estaba en capacidad de entender la naturaleza de su acto o de determinar su conducta, a causa de trastorno mental o inmadurez psicológica, es lo que busca la defensa de un hombre señalado de matar a su padre en el barrio El Guamal, de Manizales, el 21 de junio del año pasado.
La audiencia de acusación se ha aplazado dos veces este año, la última esta semana. La abogada no pudo conectarse y al procesado no lo enlazaron desde la cárcel. Sin embargo, la defensa indicó que aún no le han dado cita en Medicina Legal para la valoración de su cliente. Se reprogramó para el 24 de abril.
El deceso de Luis Enrique Franco Vallejo, de 66 años, se dio en una casa de la calle 51A con carrera 39. Inicialmente se habló de una persona fallecida al rodar por unas escalas.
Sin embargo, la historia dio un giro y se señaló al descendiente como presunto responsable de ese deceso (parricidio).
El señalado habría matado a su padre desde la mañana, dentro de la vivienda en la que vivían juntos, pero solo en la tarde buscó ayuda de dos vecinos. Los hechos se dieron en presencia de un menor de edad, con autismo, sobrino del sindicado.
El presunto responsable, contaron testigos, salía y entraba del predio, llorando. Primero tocó una puerta y no le abrieron, luego acudió a la vivienda de dos hombres. Les pidió que lo acompañaran a su casa para llevar al papá a un centro asistencial. "Ya le limpié la sangre de la carita. Si me toca pagarlo, lo pago, pero ayúdenme", les indicó.
Todo apunta a que lo empujó por unas escalas internas y luego lo golpeó en varias ocasiones con la hebilla de una correa.
Si es declarado inimputable recibe una pena, pero se paga en la Clínica San Juan de Dios, no en cárcel. Si se recupera antes de cumplirla, avalado con certificación médica, queda libre.
Luis Enrique Franco Vallejo, asesinado en El Guamal.