Foto | Archivo | LA PATRIA
Los delincuentes habrían cometido hurtos similares en cinco ciudades.
De tres capturados por cometer hurtos a mano armada y bajo engaños en Colombia, dos ya pagan sus condenas y el tercero, conocido como Reina, espera en una cárcel que se adelante el proceso judicial.
Se trata de una banda proveniente de Bogotá que se hacía pasar como una peligrosa organización expendedora de estupefacientes. Intimidaba a sus víctimas con tal confianza que las obligaba a entregarle dinero y elementos de valor.
Así le ocurrió a un profesor universitario, a quien interceptaron el 9 de febrero del 2022 en el sector de El Cable de Manizales. Lo señalaron de ser un jíbaro y estaba invadiendo su zona de influencia, por lo que debía acceder a sus exigencias.
Lo llevaron hasta un cajero automático, de donde retiró $4 millones 500 mil. Luego le ordenaron entregarles un celular, discos duros de la universidad en la que laboraba y un maletín, lo que ascendió a $13 millones.
Luego le manifestaron que si comprobaban que no era de la tal banda adversaria, le devolverían los elementos. Sin embargo, ante una asustada víctima, emprendieron la huida.
Capturas
El afectado acudió a la Sijín de la Policía de Manizales, en donde puso la denuncia. Una semana después, en un retén de la Seccional de Tránsito y Transporte instalado cerca del peaje de Pavas, los uniformados interceptaron un vehículo con tres personas quienes tenían en su poder distintos artículos robados.
Los trasladaron al Comando, en donde los individualizaron y la Fiscalía les imputó cargos por receptación, pero quedaron libres. Luego, la Línea de Hurto a Personas asumió la investigación y mediante el análisis de cámaras de seguridad y reconocimientos fotográficos, detectaron que se trataba de la banda bogotana.
Los investigadores lograron capturar a Juan Pablo Villamil, condenado a 16 años de cárcel e internado en Pasto, y luego a Sebastián Bohórquez, quien indemnizó a su víctima y recibió una pena de 4 años. Sin embargo, faltaba uno.
Una pista: Chile
Según la Policía, se supo que Reina se escondía en Chile, aunque no había más datos y en Migración mucho menos registro de este, por lo que ingresó ilegalmente a este país. En consecuencia, se solicitó una circular azul ante la Interpol.
Y el juego no le duró mucho, pues cometió un fleteo en Santiago de Chile. Asaltó a una mujer que recién había retirado unos 15 millones en pesos chilenos (cerca de $60 millones), pero lo detuvieron en flagrancia.
Allí lo condenaron a pagar 19 meses de prisión y una vez recuperó su libertad, ya las autoridades colombianas tenían los ojos puestos encima de él. En marzo pasado lo capturaron, lo extraditaron y en Bogotá lo entregaron a la Sijín, que lo presentó ante un fiscal en Manizales.
Durante las audiencias de control de garantías, Reina no aceptó cargos por hurto calificado y agravado, y lo enviaron a la cárcel. El sujeto estaría buscando un preacuerdo.
En otras capitales
Según la Sijín, entre los elementos incautados a los delincuentes hallaron lo hurtado en otros municipios. Cuando se analizaron, se percataron de que los habían robado los mismos tres tipos bajo la misma modalidad con la que engañaron al docente. Los hechos se dieron en Medellín, Armenia, Ibagué y Tunja.