Fotos | Cortesía | LA PATRIA
Entre la madrugada de ayer y las 8:00 a.m. tres caldenses perdieron la vida en dos accidentes de tránsito aislados. El primer hecho cobró la vida de dos hombres en Riosucio. El segundo, la de una mujer oriunda de Chinchiná, en Santa Cruz (Bolivia).
El caso del occidente de Caldas se dio cuando dos ocupantes de una moto chocaron con un puente sobre el río Las Estancias, vereda del mismo nombre en el Resguardo Nuestra Señora Candelaria de La Montaña. Luego de impactar cayeron al vacío y perecieron.
Las víctimas fueron identificadas como Juan Carlos Quiceno González, de 46 años, y Olmedo de Jesús Becerra Romero, de 48. Las autoridades conocieron el caso a las 12:20 a.m. Voluntarios de Bomberos Riosucio colaboraron con el CTI en la recuperación de los cuerpos para que se desarrollaran las diligencias de inspección. Luego los trasladaron a una morgue de Medicina Legal.
En un país lejano
La chinchinense Natalia Arcila Ciro, de 19 años, quien se movilizaba en moto, murió en Santa Cruz de la Sierra (Bolivia), al ser pisada por un tractocamión. Se tienen varias versiones sobre lo ocurrido.
Un testigo relató que la joven trató de adelantar entre dos vehículos y perdió el control de la motocicleta, por lo que cayó debajo de la carrocería. En ese momento el camión se puso en marcha y le pasó por encima.
Otra persona que dijo haber presenciado el hecho comentó que el vehículo de carga avanzó cuando el semáforo dio luz verde y la mujer que venía en la moto estaba cerca a las llantas traseras. Al parecer la tumbó con estas y la arrolló.
El conductor del tractocamión quedó detenido de forma preventiva para que entregue su versión y se definan las medidas judiciales que determinen las autoridades locales, indicó el portal www.clave300.com.
El medio digital informó que un conocido de Natalia, también colombiano, contó que ella llegó hace cinco meses a Bolivia y trabajaba junto a su familia en un negocio de venta de electrodomésticos en Santa Cruz.
Sus parientes y conocidos en Chinchiná piden ayuda para repatriar el cuerpo, pues les indicaron que ese traslado cuesta cerca de $20 millones.