La detención del sujeto.

Foto | Cortesía | LA PATRIA La detención del sujeto.

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LA PATRIA | MANIZALES

A la cárcel, por acceso carnal abusivo y actos sexuales con menor de 14 años, enviaron a un sujeto, de 44 años, señalado de abusar de su hija, de 9.

Lo aprehendieron en el kilómetro 3 de la vía Chinchiná-Manizales, hasta donde llegaron uniformados del Grupo de Infancia y Adolescencia, con orden emanada por el Juzgado Promiscuo Municipal de Palestina.

La mamá de la niña denunció al tipo el pasado 20 de octubre, después de que le revisó el celular a su hija y le encontró material fotográfico de sus partes íntimas, enviado al papá. La madre, después de dialogar con ella, se enteró de todas las acciones que cometía en su contra desde hace un año.

Según la mujer, el hombre aprovechaba el momento en que quedaba bajo su cuidado para practicar todo tipo de vejámenes sexuales. Además, la constreñía para que le enviara material fotográfico.  

Contra el abuso de menores

  • *Bríndeles información sobre qué es el abuso sexual y cómo prevenirlo.
  • *Promueva en ellos el respeto y el cuidado por su cuerpo y el de los demás.
  • *Enséñeles a expresar rechazo frente a caricias en sus partes íntimas.
  • *Fortalezca su personalidad y autoestima.
  • *Construya confianza con ellos, escúchelos y créales.
  • *Conozca a las personas con las que comparten su tiempo, juegos y en dónde se reúnen.
  • *Esté atento a las personas con las que se comunica por internet o celular. Verifique la identidad de sus amigos virtuales.
  • *Enséñeles los límites que deben tener en relaciones con otros.

 

Identifique

Los comportamientos de los niños también son una señal de alerta

  • - Conductas sexuales inadecuadas para la edad. Que un niño o niña demuestre tener un conocimiento acerca de las relaciones sexuales que no debería, que se toque con insistencia sus órganos sexuales, que haga representaciones de una relación sexual, por ejemplo, con sus pares o con un muñeco al que le hace movimientos con su pelvis, o que haga dibujos alusivos a una relación sexual es un claro indicador de que algo no va bien.
  • *Aquí hay que indagar, de forma amable, respetuosa y amorosa, dónde aprendió eso, con quién o con quiénes lo aprendió, quién inició la actividad y cómo participa cada uno.
  • *Cambios bruscos en su estado de ánimo. Cuando es víctima de abuso sexual, generalmente, tiende a volverse introvertido, ansioso o agresivo.
  • *En otros casos puede mostrarse más extrovertido de lo normal. También debe llamar la atención la incomodidad o el temor que manifieste con respecto a un determinado adulto.
  • *Retrocesos en su desarrollo. Hay niños que, tras ser sometidos a situaciones estresantes, o a sucesos que les provocan angustia y temor, presentan retrocesos.
  • *Cambios físicos. Aunque la mayoría de víctimas de abuso sexual no presentan señales corporales, en algunos casos sí es posible que se presenten pequeñas lesiones o cicatrices genitales o anales, dolor abdominal o en la región genital que deben ser consultados inmediatamente con el personal de salud.
  • *Por su parte, el embarazo en menores de 14 años, de acuerdo con la ley colombiana, es una clara muestra de abuso sexual.

 

¿Qué hacer ante la sospecha?

  • Una vez la madre, el padre o el cuidador haya identificado alguna de las señales de alerta será clave realizar un abordaje adecuado de la situación empezando por acercase de forma amable, empática y cariñosa para así animarlo a hablar de la situación por la que está atravesando.
  • Es fundamental que al hacerlo el adulto esté sereno, ya que si se muestra angustiado o desesperado causará temor en el menor de edad y reducirá al mínimo las posibilidades de que narre los hechos.
  • Para empezar el diálogo es esencial recordarle que su familia lo ama y que cuenta con todo su apoyo y su protección para superar cualquier problema o situación que le genere incomodidad.
  • Se recomienda no juzgar a la víctima mediante expresiones como “¿por qué no me habías dicho antes?” o “¿por qué te quedaste callado?” y mucho menos confrontarlo con el agresor, ya que esto genera miedo y se corre el riesgo de silenciar al menor de edad quien puede terminar retractándose o negando los hechos.