EFE | LA PATRIA | BOGOTÁ

El embajador de Colombia ante la FAO, con sede en Roma, Armando Benedetti, es investigado en España por una supuesta agresión machista contra su esposa, Adelina Guerrero, que ocurrió el pasado 30 de junio en Madrid, informó ayer el Ministerio de Relaciones Exteriores.

"Hemos sido notificados de la situación por parte de nuestra Embajada en España. La Cancillería ha activado los mecanismos oficiales para conocer lo sucedido e iniciar el protocolo correspondiente. Este caso está en conocimiento de nuestra oficina de control interno disciplinario y cuando tengamos resultados actuaremos conforme a la ley", expresó el Ministerio en un comunicado.

Según informes de la Policía madrileña, las autoridades fueron informadas de una posible agresión verbal de Benedetti contra su esposa en una residencia privada de la capital española que "pudo haber escalado a una agresión física, aunque testigos presentes impidieron que esto ocurriera".

El embajador invocó ante las autoridades su inmunidad diplomática para evitar ser detenido, pero la Policía le abrió un expediente por la denuncia presentada por Guerrero ante una unidad especializada en casos de violencia de género.

"La Cancillería repudia y condena cualquier tipo de agresión o violencia contra la integridad de las mujeres", agregó el Ministerio.

Benedetti manifestó en su cuenta de X que "lo que se ha dicho sobre una supuesta agresión no es cierto y no se ajusta al hecho en España".

"La verdad se demostrará en el tribunal español. En este momento me encuentro en medio de un proceso de divorcio que responde a la esfera privada y familiar y, por el bien de mis hijos, seré prudente", agregó el diplomático.

Polémico político

Armando Benedetti, quien fue de los mayores apoyos del presidente colombiano, Gustavo Petro, durante su campaña electoral, fue nombrado como embajador en Caracas en septiembre de 2022 pero dimitió en junio del año pasado al verse involucrado en un escándalo de escuchas ilegales en el gabinete presidencial.

En un enfrentamiento verbal con Laura Sarabia, entonces jefa de gabinete de Petro y actual directora del Departamento Administrativo de la Presidencia (Dapre), amenazó con revelar información comprometedora sobre la financiación de la campaña presidencial.

En unos audios sobre ese enfrentamiento, relacionado con una disputa de cargos públicos y que fueron revelados por la revista Semana, Benedetti reclamó de forma grosera a Sarabia un mejor trato del Gobierno.

En una de esas discusiones telefónicas, el embajador le dijo a su interlocutora que él gestionó 15.000 millones de pesos para la campaña de Petro y amenazó con que si contaba quiénes la financiaron en la Costa Atlántica, "nos hundimos todos, nos acabamos todos, nos vamos presos".

Tras la renuncia de Benedetti a la embajada en Caracas y el escándalo causado por sus amenazas a Sarabia, el entonces ministro de Exteriores colombiano, Álvaro Leyva, dijo que al exembajador no se le podía creer pues es un "drogadicto".

Sin embargo, en febrero de este año, Benedetti volvió al cuerpo diplomático al ser nombrado embajador ante la FAO, con sede en Roma, para lo cual el Gobierno reabrió esa misión que estaba cerrada desde 1999.