Foto | EFE | LA PATRIA El canciller encargado de Colombia Luis Gilberto Murillo y su homóloga de Argentina, Diana Mondino, este viernes en Bogotá.
El canciller encargado de Colombia, Luis Gilberto Murillo, y su homóloga argentina, Diana Mondino, se reunieron este viernes en Bogotá para zanjar la crisis diplomática causada por las reiteradas ofensas del presidente Javier Milei a su homólogo Gustavo Petro e iniciar un "nuevo momento" de la relación bilateral.
La reunión tuvo lugar en el Palacio de San Carlos, sede de la Cancillería, donde Murillo y Mondino se dieron la mano luego de tres meses de tensiones diplomáticas.
"Fue una reunión muy productiva donde encontramos áreas de colaboración en distintos sectores; cooperación en temas de seguridad, cooperación en temas comerciales, de desarrollo económico y, sobre todo, reafirmando nuestras áreas de entendimiento", manifestó el ministro colombiano.
Murillo agregó que existe "una relación muy cercana entre Colombia y Argentina y este es un nuevo momento de la relación que queremos mantener en términos muy pragmáticos y en beneficio de ambos países, de ambos pueblos y de ambas naciones".
El encuentro fue a puerta cerrada, pero en fotos divulgadas por la Cancillería colombiana se aprecia a los dos cancilleres sonrientes y acompañados de otros funcionarios.
La reunión comenzó al mediodía y en ella Murillo y Mondino trataron asuntos como el comercio bilateral, turismo, cooperación, seguridad y desarrollo empresarial, entre otros.
Según la Cancillería, "Colombia tiene especial interés en ampliar la agenda comercial con Argentina en turismo y desarrollo sostenible", al tiempo que destacó que los dos países tienen "una robusta relación de cooperación en temas de defensa".
Durante su visita a Bogotá, la canciller también se reunió con el representante especial del secretario general de la ONU en Colombia, Carlos Ruiz Massieu, y tiene previsto encontrarse con el jefe de la Misión de Apoyo al Proceso de Paz en Colombia de la OEA (MAPP/OEA), Roberto Menéndez.
Regreso a la normalidad
Hace dos semanas, al anunciar la visita de Mondino, el embajador colombiano en Buenos Aires, Camilo Romero, aseguró que el propósito era "renovar los lazos de amistad que nos han unido por más de 200 años", ya que "el afecto, el cariño y la hermandad de nuestros pueblos debe ser siempre superior".
Romero había sido llamado a consultas en Bogotá el pasado 26 de enero, después de que Milei asegurara, en una entrevista con la periodista Patricia Janiot, que el presidente colombiano "es un comunista asesino que está hundiendo" al país.
Ese fue el primer capítulo del rifirrafe entre los dos Gobiernos por las declaraciones de Milei, que un mes después, el 24 de febrero, se refirió a Petro como "una plaga letal para los propios colombianos", ante una pregunta de una periodista del canal NTN24, lo que provocó un "enérgico rechazo" de la Cancillería de Bogotá a lo que calificó de "irresponsables declaraciones" del mandatario argentino.
La gota que colmó el vaso fue la entrevista concedida el pasado 26 de marzo por Milei al canal CNN en Español en la que llamó a Petro "asesino terrorista", lo que motivó el anuncio de expulsión de diplomáticos de la embajada de Argentina en Colombia, una drástica medida que no llegó a ejecutarse.
El 31 de marzo, en un comunicado conjunto, las Cancillerías argentina y colombiana, dijeron que habían mantenido conversaciones para "afianzar las relaciones diplomáticas", un gesto que indicaba que las aguas se habían apaciguado y que la reunión de hoy confirma que la normalidad regresó.
Tras la reunión de este viernes, Romero aseguró que lo sucedido "nunca debió pasar", pero "los Gobiernos, las Cancillerías han hecho un gran trabajo, se ha impuesto la voz de la diplomacia a la de los insultos".
Romero añadió que el encuentro de hoy "lo que hace es honrar el pasado: 201 años de relaciones entre los dos países y por supuesto afianzar ese vínculo, ese lazo (...) por el bienestar de la gente y el bienestar de la ciudadanía".
"Este es un ejemplo de cómo resolver un tema de conflictos más en el mundo que hoy tenemos", concluyó el embajador colombiano en Buenos Aires.