Foto | EFE | LA PATRIA
El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, recibió ayer a su homólogo venezolano, Nicolás Maduro, y criticó las sanciones impuestas a ese país en los últimos años, aunque aclaró que de él dependerá que Venezuela tenga en 2024 unas elecciones "libres".
El presidente colombiano, Gustavo Petro, asistirá hoy en Brasilia a la cumbre convocada por su homólogo de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, que tiene como ejes la integración regional y la lucha contra la crisis climática.
"Iré a esta cumbre de presidentes de Latinoamérica para lograr una agenda de lucha contra la crisis climática en nuestro continente a través de un eficaz y concreto proceso de integración latinoamericana", escribió el jefe de Estado colombiano en su cuenta de Twitter.
Petro ha hecho de la lucha contra la crisis climática su bandera en los foros internacionales en los que ha participado, en los que incluso ha alertado que "la humanidad está peligro".
Colombia también irá para reiterar "el compromiso del país con la integración, la concertación, la cooperación regional y la paz, y destacará la necesidad de trabajar conjuntamente por el desarrollo y el bienestar de los 400 millones de habitantes", según detalló en un comunicado el Ministerio de Relaciones Exteriores.
Petro viajará hoy en la mañana acompañado del ministro de Relaciones Exteriores, Álvaro Leyva, y la viceministra de Asuntos Multilaterales, Elizabeth Taylor Jay. Se espera que Leyva mantenga reuniones bilaterales al margen de la cumbre.
Lula invitó a esta cumbre a los presidentes de los otros 11 países suramericanos: Argentina, Bolivia, Chile, Colombia, Ecuador, Guyana, Paraguay, Perú, Surinam, Uruguay y Venezuela.
Según el Gobierno brasileño, la única ausente será la mandataria peruana, Dina Boluarte, quien estará representada por el presidente del Consejo de Ministros, Alberto Otárola.
Al respecto, el presidente Petro dijo: "Esperamos un proceso de recuperación de la democracia en el Perú".
El febrero pasado el Congreso peruano declaró persona non grata a Petro en rechazo a sus declaraciones contra la Policía Nacional del Perú (PNP) y pidió a las autoridades que garanticen que "no ingrese al territorio nacional".
Petro ha expresado varias veces su desacuerdo con lo ocurrido con el expresidente Pedro Castillo. Incluso en abril pasado lo defendió en un discurso pronunciado ante la Organización de Estados Americanos (OEA) en donde dijo que el exgobernante está preso "sin sus derechos políticos".
El objetivo de esta cumbre de Brasil, que se celebrará casi en su totalidad a puerta cerrada, es retomar el diálogo y analizar la posibilidad de que la región vuelva a contar con un foro de integración "puramente suramericano", que sea "permanente, inclusivo y moderno", según el Gobierno de ese país.
Un variopinto mapa político
El actual mapa político suramericano es diverso, aunque con una cierta mayoría de izquierda, que abarca desde el más radical bolivarianismo del venezolano Nicolás Maduro hasta el pragmatismo ideológico de Lula o el socialismo rosa del chileno Gabriel Boric.
También el peronismo progresista del argentino Alberto Fernández o el "humanismo" del colombiano Gustavo Petro, junto a conservadores como el uruguayo Luis Lacalle Pou y el ecuatoriano Guillermo Lasso, este último en medio de una seria crisis política.
A pesar de ese variopinto espectro político, el canciller brasileño, Mauro Vieira, ha dicho que en Brasilia se buscará identificar las "coincidencias" y "no las diferencias".