Junto a las manifestaciones, además, hubo huelgas en el transporte público y en el sector educativo.
EFE | LA PATRIA | PARÍS
Con huelgas y manifestaciones masivas en las calles, cientos de miles de franceses secundaron ayer la llamada a la movilización lanzada por los sindicatos contra la reforma del sistema de pensiones propuesta por el Gobierno del presidente Emmanuel Macron, decidido a aprobarla a pesar del fuerte rechazo popular.
"La movilización es la imagen de lo que leemos en las encuestas, es decir, que una gran mayoría de los ciudadanos de este país están en contra de esta reforma", afirmó Philippe Martínez, secretario general de la Confederación General del Trabajo (CGT) francesa, desde la cabecera de la multitudinaria manifestación organizada en París.
De acuerdo con los sindicatos, solo en la capital unas 400.000 personas marcharon contra los planes del Gobierno y formaron una marea humana que se expandió durante horas entre la Plaza de la República y la de la Nación. Para el Ministerio de Interior, no obstante, en la capital se congregaron 80.000 personas.
Algunos de los manifestantes causaron incidentes y destrozos por los que fueron detenidas 38 personas.
La de París fue la demostración de músculo más importante de la jornada de protestas, que se extendieron también por toda Francia, desde Marsella a Nantes.
A nivel nacional, los sindicatos estiman que se logró sobrepasar el objetivo de dos millones de manifestantes, en tanto que el ministerio del Interior rebajó la cifra a 1,1 millones.
"El mensaje es claro: No al aumento del tiempo de cotización y no al retraso de la edad legal de comienzo de la jubilación. Es simple", recalcó Martínez.