Foto | EFE | LA PATRIA
El pasado sábado 3 de agosto en el Parque de las Luces de Medellín se dieron cita varios venezolanos para participar en una manifestación en rechazo a los resultados del Consejo Nacional Electoral (CNE), en las elecciones presidenciales del domingo 28 de julio que dieron como ganador a el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro.
LA PATRIA | MANIZALES
Según la organización de Derechos Humanos Human Rights Watch, hasta el 31 de julio perdieron la vida 20 personas durante las protestas desatadas en Venezuela luego de los comicios del 28 de julio. Mientras que el Gobierno de Nicolás Maduro reporta un saldo de por lo menos dos mil personas detenidas y dos militares muertos.
El analista político Ryan Moukheiber habló con LA PATRIA sobre la situación en Venezuela tras los comicios que, al parecer, dan como ganador a Maduro, con resultados manchados por las dudas sobre el conteo.
Mientras la comunidad internacional exige que se hagan públicas las actas de los comicios en las que se evidencie la supuesta victoria, en las calles de Venezuela las protestas continúan rechazando el resultado. Incluso, la mayor coalición opositora de Venezuela, la Plataforma Unitaria Democrática (PUD), solicitó este lunes (5 de agosto) la liberación "inmediata" de las personas detenidas en las múltiples protestas registradas tras las presidenciales.
¿Qué posibilidades hay de que Maduro acepte la derrota?
A estas alturas Maduro no aceptará la derrota de las elecciones porque se declaró ganador y presentó los resultados comunicados por el Comité Nacional Electoral (CNE) para sustentar su declaración. Ese organismo es controlado por el oficialismo y ya no puede retroceder, quiere mantener esa fachada de elecciones libres y democráticas en la que se basa para reclamar su legitimidad en el poder.
Creo que, incluso, preferiría acabar derrocado que aceptar la derrota porque en este escenario podría seguir alegando que él es el ganador legítimo de las elecciones, pero que fuerzas extranjeras como Estados Unidos causaron su derrocamiento. Si admite su derrota, todo su discurso hasta ahora se derrumbará porque eso sería aceptar que los números oficiales dados son falsos, saldría del Palacio de Miraflores como alguien que cometió fraude en vez de un hombre supuestamente fuerte, víctima de un complot.
La única vía para él ahora es seguir jugando esa carta de la supuesta influencia extranjera como razón de que la oposición dice haber ganado y con este discurso aferrase y mantenerse.
La OEA no logró el apoyo necesario para aprobar una resolución con el fin de exigir las actas de los comicios en Venezuela, ¿qué otro recurso se puede buscar internacionalmente para presionar y hacer públicas las actas?
No soy experto jurídico. Por lo que entiendo, las resoluciones hacia un Estado miembro específico son más simbólicas que vinculantes y aunque fueran vinculantes y hubiera sido aprobada esta resolución, no hay ninguna herramienta coercitiva del que dispone la organización para hacer aplicar tales resoluciones y los recursos son pocos porque Venezuela ya se acostumbró al aislamiento del escenario geopolítico, tanto continental como global, así que medidas de presión y sanciones adicionales probablemente no servirían mucho.
Además, el régimen de Maduro tiene algunos importantes aliados en el mundo como Rusia y China. Aunque se entreguen las actas, algo que ha dicho Maduro es que está dispuesto a asegurar que son fiables, pero el régimen no dejó que observadores internacionales neutros supervisaran el proceso electoral, entonces aunque se entregue creo que la confianza es difícil de restablecer.
Colombia se abstuvo de votar, ¿qué implica esa decisión?
Una posición que se une a México y Brasil y a otros países más pequeños, pero la de estos tres países (Colombia, México y Brasil) es importante porque son los más poblados de Latinoamérica entonces sí tienen un peso importante y un poder de presión y creo que esta posición que subraya dudas, sin ponerse claramente en contra de los resultados anunciados, esta ambigüedad, es debido a que los gobiernos de estos países están entre dos aguas.
Estoy seguro de que no ven creíble la reelección de Maduro o esas cifras que comunica y quieren ser fieles a los valores democráticos de los que se enorgullecen los países respectivos. Aunque Colombia, México y Brasil tengan muchos problemas, sí son países democráticos, tienen esa reputación. Por otro lado, esos tres gobiernos de izquierda sienten afinidades económicas de fondo con el gobierno chavista y lo mismo con su electorado.
También tienen presión común hacia influencias extranjeras, particularmente de Estados Unidos y el capitalismo global, por eso creo que hay un poco de reticencia en condenar del todo al Gobierno de Maduro y los resultados de las elecciones. Además, creo que no quieren perder totalmente la simpatía de Maduro para pretender jugar un papel de mediador en caso de futuras negociaciones para una transición de poder en Venezuela.
¿Cuáles serían los escenarios posibles frente a la incertidumbre de la elección: se aferra, lo derrocan o negocia con la oposición?
El régimen de Maduro controla la Asamblea Nacional de Venezuela, el Sistema Judicial, los medios de comunicación, las fuerzas de seguridad y el Ejército, pero más que todo estas dos últimas son clave para su mantenimiento en el poder porque son las que poseen los principales recursos de coerción y de represión. Hay varias movilizaciones populares contra Maduro, pero solo el aval del Ejército lograría que sea quitado del poder.
Sin embargo, el régimen se ha construido, como toda buena dictadura, colocando a las personas más fieles en los puestos más altos y ofreciéndoles beneficios y privilegios que no quieren arriesgarse de perder. Por eso, la alta cúpula de las fuerzas armadas hasta ahora ha sido muy leal al oficialismo.
Los soldados de menor rango sufren más de los problemas que afectan a la gran mayoría de los venezolanos porque no tienen la palanca necesaria para oponerse a sus superiores. Hay que añadir también que hay un cierto adoctrinamiento hacia las ideas de la revolución chavista en estas instituciones.
Si las manifestaciones se vuelven tan grandes y constantes que solo una violencia extrema lograría contenerlas, ¿hasta qué punto la Policía y los militares estarían dispuestos a oprimir y matar a sus propios compatriotas para salvar al régimen si ven perdido en gran parte el apoyo popular?
Haga clic aquí y encuentre más información de LA PATRIA.
Síganos en Facebook, Instagram, YouTube, X, Spotify, TikTok y nuestro canal de WhatsApp, para que reciba noticias de última hora y más contenidos.