Foto|LA PATRIA
José Fernando Olarte Osorio, secretario de Planeación de Manizales.
JOSÉ WILMAR JARAMILLO*
LA PATRIA|MANIZALES
“Tuve la oportunidad de estar en este mismo rol entre los años 2012 y 2015 con el alcalde Jorge Eduardo Rojas, fue un momento también complejo para la ciudad”, empieza manifestando José Fernando Olarte Osorio, el nuevo secretario de Planeación de Manizales.
“En el 2011 tuvimos una sucesión de eventos trágicos y circunstancias muy fuertes. Producto de la ola invernal estuvo la ciudad sin agua, sin gas; con la calamidad de Cervantes, el bus accidentado en Sabinas, los niños que murieron en la Gruta. Fue una situación muy compleja, al punto que nos llamaron una ciudad inviable en medios de comunicación bogotanos. Recuperar un nombre, un prestigio y confianza en la ciudad y en el Gobierno, fue un reto enorme”.
Radiografía actual
“Encontramos ahora circunstancias similares en lo que significa recuperar la relación con los ciudadanos, ya no marcada por desastres, sino por asuntos relacionados con la forma en la que se administró la ciudad en el periodo anterior: obras inconclusas, incertidumbres con respecto a las inversiones realizadas y una baja credibilidad”.
Define como un reto los escenarios hallados y resalta encontrar una Manizales y una Alcaldía de gente buena, decidida y comprometida para que siga habiendo una alta calidad de vida. “Un buen vividero. En eso soportamos nuestra gestión”.
Enumera una lista de problemas, y recuerda que el alcalde Rojas en su campaña, en el empalme y en la posesión utilizó una frase muy particular que marca mucho lo que define este Gobierno: para cada problema, una estrategia acompañada por un plan de actividades y de acciones concretas que lleven a una solución.
*Arquitecto
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Problemas y estrategias
1- Movilidad
El primer asunto son los comportamientos que tenemos todos los actores de la vía: peatones, motociclistas, conductores de vehículos de servicio público y privado; es entender y asumir que todos tenemos un rol dentro de ese entramado, y ese rol nos implica unos compromisos con el otro. Que cuando caminamos somos peatones, pero cuando nos subimos al vehículo ya somos usuarios o conductores y somos la misma persona.
Hay algo que marca la línea y es un asunto de cultura ciudadana. Creo en el restablecimiento y promoción de la tradición de cultura y respeto por la ciudad que nos caracterizó, siendo ese el compromiso desde esta Administración.
La consigna es, además de recuperar la confianza, generar una cultura ciudadana que permita tener una ciudad más amable, que realmente genere sentido de pertenencia para todos.
2- Pasos peatonales
El peatón es el principal actor vial y tiene la prelación. Lo sabe, lo percibe y lo exige, pero cuando se monta a conducir se le olvida. Entonces siente que tiene la prioridad. Todo sucede porque desinteriorizamos la norma. Se nos perdió de las rutinas y de las costumbres, entonces ya no es cultura, es individualismo. ¿Qué tenemos que hacer? Hay que retomar la costumbre de entender que en la vía estamos todos y que en algún momento podemos ser uno o podemos ser otro.
Lo que se ha visto en la ciudad en los primeros días de esta Administración ha sido mucho control, para recordarle a cada uno de los actores -que somos todos- que tenemos unos compromisos con la ciudad en el marco de unas normas que se hacen, no por un afán de incomodar, sino precisamente de salvaguardar los derechos que tenemos en la vía.
Pienso que somos muy egoístas, más que con la ciudad, con el otro. Hay que entender que en la ciudad estamos todos, que todos somos actores del espacio en que vivimos y ese vivir bien implica respetar los derechos que tiene el otro. Así como yo los exijo para mí, también respetar los que son exigibles para los demás. En eso es en lo que enfocamos el concepto de cultura ciudadana.
3- Vendedores informales
El comercio es una actividad que genera la supervivencia para muchas personas, y creo que como ciudad tenemos que comprender, entender, definir y decidir cuáles son las capacidades que tiene de albergar en espacio público el desarrollo de actividades comerciales. Parte de la dinámica de las ciudades es el comercio que se da en las calles. Entonces cómo tener una adecuada regulación y distribución de las cargas y los beneficios de lo que esto implica.
Algo muy importante en lo que queremos trabajar es que se fortalezca más el nombre de comerciantes que el de informales. Que como comerciantes puedan ser formales, así sea que su actividad la desarrollen en espacio público habilitado para ello. Lo que estamos buscando son estrategias para definirlo, particularmente con lo que nos interesa desde el concepto de urbanismo y del espacio público para desarrollar esa actividad comercial y no superarla. Cuando la superamos es cuando irrespetamos el derecho que tienen otros de disfrutar del espacio público. Lograr esos equilibrios no es tarea fácil, pero no implica que no la hagamos, pero entre todos: los comerciantes que hoy están en sus locales, los vendedores que hoy llamamos informales, que queremos que sean formales; bien sea en un local o en un espacio que podamos definir como ciudad para ello, y lo haremos con todas las instancias administrativas que tenemos.
Estamos trabajando en la idea de definir y establecer espacios donde se puedan ubicar comerciantes. Diseñar y rediseñar los espacios públicos para permitir esa actividad sin que se corte la posibilidad de su ocupación para el disfrute, la integración y la actividad social de la gente. Conformamos un equipo técnico con las secretarías de Infraestructura, Desarrollo Social, del Interior, de Medio Ambiente, Planeación, de la Mujer, Instituto de la Cultura; en fin, un grupo fuerte para definir y decidir estrategias para todos los casos.
4- Revisión del POT
Es un tema que la ciudad tiene pendiente. Es una posibilidad, una oportunidad, pero además hay asuntos que son obligación en el Plan de Ordenamiento Territorial (POT), como los ambientales. Recibimos un estudio de la Administración anterior, en el que se hacen planteamientos respecto a las formas en las que se puede desarrollar el aprovechamiento económico del espacio público. Lo estamos revisando y ya hemos hecho sugerencias al equipo consultor que desarrolló ese ejercicio. En los próximos días esperamos hacer unos talleres comunitarios para definir las condiciones, posibilidades, capacidades y reglas del aprovechamiento económico del espacio público.
5- Generación de basuras
No se puede culpar del problema de las basuras a la empresa o a los recicladores solamente. El ciudadano que la pone en la calle el día y a la hora que no es, también es responsable. El problema de la basura surge desde el momento en el que se genera. Hay que hacer un ejercicio pedagógico, motivacional y ciudadano para un manejo adecuado. Reducir lo que estamos mandando para el Relleno Sanitario, pero también obviamente con la empresa tener estrategias ante una ciudad que ha crecido. Nos encontramos con un modelo que debe ajustarse a una ciudad de 450 mil habitantes y eso necesariamente impacta en la prestación de los servicios que se dan.