Foto | Tomada de @zoobaq | LA PATRIA
El oso de anteojos Chucho falleció a los 30 años, informó el Zoológico de Barranquilla.
El Zoológico de Barranquilla informó este miércoles a través de sus redes sociales la muerte de Chucho, el oso de anteojos (Tremarctos ornatus) que fue trasladado desde Manizales en junio del 2017.
El martes Corpocaldas reportó sobre los problemas de salud que se habían detectado en el animal debido a que en los últimos días disminuyó el consumo de alimentos y del procedimiento de urgencia que iban a realizar hoy con anestesia fija e inhalatoria, para tomar muestras y observar la magnitud de la herida que tenía en la boca.
El Zoológico, en su comunicado, detalló que a las 8:45 de la mañana Chucho falleció durante el procedimiento veterinario, sufrió un paro cardiorrespiratorio fatal. "El equipo confirmó la hipótesis de que Chucho presentaba masas de aspecto maligno en su tracto respiratorio superior (cornete nasal derecho) por lo que no se descarta que existiera metástasis en el pulmón y masas en otros órganos, que podrían o no estar asociadas al mismo tipo de cáncer", apunta la entidad.
Agregaron que desde hace cinco días Chucho disminuyó su consumo de alimento, lo que llamó la atención de sus cuidadores. "También notamos que su respiración se había alterado y finalmente detectando una herida al interior de su boca, en el paladar duro, cerca a los últimos molares, que sospechamos podría ser producto de un cáncer agresivo conocido como carcinoma de células escamosas, el mismo Chucho había padecido el año pasado y que fue removido con éxito", afirmaron.
La salud de Chucho se deterioró en poco tiempo, el Zoológico informó que hace dos meses le habían practicado unos exámenes de rutina, con varios expertos, en los que no se encontraron hallazgos relacionados con cáncer. "En general, la salud de Chucho había sido estable hasta hace tan solo unos pocos días", afirmaron.
Chucho tenía alrededor de 30 años al momento de su muerte. "Superando la esperanza de vida para un oso de anteojos bajo cuidados humanos", precisó el Zoológico de Barranquilla.
Contaron que al oso le gustaba estar dentro de la piscina en su recinto y que sus alimentos favoritos eran la mazorca, la sandía y su colada de frutas (banano, sandía, papaya y avena).
Chucho llegó de la Reserva La Planada (Nariño) a la Reserva Río Blanco de Manizales en 1998, junto a una hembra llamada Clarita, que falleció en el 2010 de cáncer de útero. Él vivió durante 22 años en la capital de Caldas, hasta que el El 16 de junio del 2017 fue trasladado al Zoológico de Barranquilla.
En ese momento Corpocaldas argumentó que el traslado se realizó porque el animal estaba en peligro en la zona, ya que no contaba con alimentación ideal, un mejor hábitat y contacto con animales de su especie. Además la Corporación informó que Chucho se había escapado de la zona donde se encontraba y que pudo poner en peligro a habitantes de Manizales, pues en una ocasión alcanzó a llegar hasta el barrio Minitas.