EFE | LA PATRIA | Tibú (Norte de Santander)

Las delegaciones del Gobierno colombiano y del Estado Mayor Central (EMC), principal disidencia de las Farc, dieron este sábado un mensaje de tranquilidad de cara al evento de mañana en el que se instalará oficialmente el diálogo de paz tras el aumento de tensiones en las últimas horas y la posibilidad de cancelar el inicio de las negociaciones y la incertidumbre del cese al fuego acordado.

El vocero de la delegación del EMC, Andrey Avendaño, que ya se encuentra en Tibú, la localidad del Catatumbo donde mañana se supone que arrancarán los diálogos, se mostró "optimista" a pesar del cruce de acusaciones que ayer intercambiaron ambas partes tras la muerte de uno de sus comandantes y el anuncio de las Fuerzas Militares de que seguirán las operaciones ofensivas.

Este mensaje de tranquilidad se da mientras camionetas de la sociedad que acompaña a los diálogos circulan por esta población, epicentro del convulso Catatumbo, con mensajes que anuncian el arranque mañana del diálogo, tan esperado por las comunidades afectadas por el conflicto.

Este domingo también se espera que comience un cese el fuego bilateral de 10 meses que, ahora, parece estar en entredicho y del que ninguna de las partes parece del todo segura.

El vocero del EMC aprovechó la víspera del evento para mandar un mensaje a Gobierno y al presidente, Gustavo Petro: "En esta situación todos estamos lo suficientemente grandes como para medir el significado de nuestras palabras".

Para la delegación del Gobierno, por su parte, "en el ambiente se respira paz", en palabras de Gloria Quiceno. "Lo llena a uno de esperanza, desde la comunidad la gente lo que quiere es la paz", dijo la integrante de la delegación, que destacó que va a haber una actividad cultural y artística esta tarde.

Los representantes de ambas delegaciones llegaron juntos al polideportivo de Tibú, municipio ubicado en la convulsa región del Catatumbo, fronteriza con Venezuela, donde siguen los preparativos para el evento de mañana.

"Tenemos que empezar cumpliendo lo que hemos firmado previamente", estimó "Avendaño", recordando el acuerdo de Playa Rica (Suárez, Cauca), adoptado hace unas semanas y que hablaba del comienzo formal de los diálogos y en paralelo también del cese al fuego.

"Ahorita no podemos nosotros resultar con otra cosa y dejar como un sinsabor ante el pueblo", apuntó el jefe de la delegación del EMC, y añadió que "la mayoría de las comunidades están esperando un cese el fuego".

Avendaño insistió en "demostrar con hechos la verdadera voluntad de las partes" que "generen confianza en las comunidades". "¿Cuántos muertos más tienen que haber para que entendamos de que las armas no van a resolver el problema de Colombia?", cuestionó el vocero del EMC.

El EMC es la principal disidencia de las Farc, formada en medio de las negociaciones de paz entre el Gobierno y la disuelta guerrilla, liderada por Néstor Gregorio Vera, alias "Iván Mordisco" y que agrupa 4 estructuras y 46 subestructuras con unas 3.400 personas.