En la pasada contienda electoral regional de 2019, Mauricio Lizcano me dijo “Usted no puede ser gobernador, la gobernación me pertenece a mí, y así me tenga que aliar con la izquierda y con esos verdes para ganarle, lo haré”. Cumplió su advertencia arrasando en las elecciones regionales con una estrategia disfrazada de firmas para iniciar campaña publicitaria de manera anticipada. Su poder es tan grande que logro al otro día de las elecciones regionales lo impensable para muchos, que el Centro Democrático en cabeza de uno de sus diputados activos del CD en la asamblea, ayudara a ser mayoría y convertirse en partido de Gobierno del Gobernador de Lizcano y de Petro. El coordinador del CD en Caldas, Gustavo Hoyos y el Diputado Diego Cardona, violando los estatutos del partido, firmaron un documento donde se declaraban partido de gobierno, el cual fue enviado a la Asamblea Departamental de Caldas. Lo propio sucedió en el concejo de Manizales, donde también se declararon partido de gobierno del nefasto alcalde Carlos Mario Marín. Todo esto auspiciado por el entonces senador Carlos Felipe Mejía y el representante a la cámara Fernando Gómez (Chano).
Me duele admitir que el Centro Democrático ha sido cómplice de las irregularidades en la alcaldía y en la Gobernación, y que además ha contribuido al fortalecimiento de Petro y Lizcano en Caldas. Esta situación es la que me ha obligado a refugiarme en la credencial que tengo por haber llegado a la asamblea de caldas en la coalición “Todos Pa delante” construida con un equipo estratégico y político propio, para poder combatir la corrupción venga de donde venga, así sea la del mismo Centro Democrático que en Caldas se vendió por un “plato de lentejas”. El propio diputado Diego Cardona en una reunión con presencia de la coordinación nacional aceptó que lo había hecho por intereses personales. Adicionalmente aprovecharon el escenario para hacerle un agravio a Óscar Iván Zuluaga. Esta situación deja muy mal parado al partido al no estar unido para hacer una oposición efectiva. Además, poco o nada consiguieron en estos años para el partido y los caldenses, más allá de la mermelada burocrática para ellos mismos, sin impulsar un solo proyecto que permitieran transformar la vida en nuestros ciudadanos en los municipios. Como quien dice, el Centro Democrático en Caldas se quedó sin el pan y sin el queso, sin opinión y sin apoyo burocrático para afrontar las elecciones regionales en octubre. La contienda será tipo David Vs Goliat. Gustavo Petro tiene en su mejor alfil caldense, Mauricio Lizcano, la oportunidad de ganar la mayoría de alcaldías y la Gobernación. Como siempre, los alcaldes actuales, los hospitales, las secretarias departamentales y las entidades descentralizadas serán vitales para que los votos aparezcan. El arquitecto Luis Carlos Velásquez ya tiene asegurado su puesto en el Gobierno Petro como el mismo lo confirmo en RCN radio. Seguramente el mismo destino tendrá el alcalde Verde Marín. Esta es la mayor prueba que la mayoría de gremios de la ciudad, con un silencio cómplice, terminaron haciéndole el juego a Petro y Lizcano en Caldas para que se quedaran con el departamento y el país.
No hay tiempo para lamentos por lo que no se pudo lograr. Ahora el propósito mayor de la Colombia Legal, democrática, incluyente y que quiere igualar hacia arriba y no hacia abajo, debe ser unirnos para que Gustavo Petro NO dure más de 4 años en el poder. Nos tendremos que tragar muchos sapos. Esperamos que en cada organización surjan nuevos liderazgos que eviten que sus partidos sean comprados por el gobierno Petro como le sucedió al Partido Conservador, por mencionar un solo ejemplo de una de las mayores contradicciones de los últimos tiempos. En el Centro Democrático se debe trabajar para “DesPetrizar” y “DesLizcanizar” el partido en Caldas. Impulsar nuevas figuras preparadas y con convicción de territorio que contribuyan a que Colombia recupere el rumbo. Para eso necesitamos el apoyo de todos, que muchos de ustedes que representan lo mejor de este país, dejen la apatía y tomen la decisión de ser candidatos. El CD deberá ser un partido de puertas abiertas a nuevos liderazgos.
Por último, agradecer a María Constanza Montoya por haber aceptado la curul del concejo de Manizales tras la renuncia de su antecesor, que también le quedo debiendo al partido y a sus electores. El trabajo serio que viene desempeñado desde su posesión nos llena de esperanza y optimismo. Esperamos poder contribuir a la causa terminando nuestro rol como diputado de Caldas y obviamente continuando con nuestra labor objetiva de independencia y por supuesto mi vocación agroindustrial.