Semanas atrás a Manizales la sacudieron dos feminicidios. Muchos tenemos presente el de Estefanía, lo sentimos cercano quizás por la visibilidad que le dio al hecho la Cámara de Comercio de Manizales por Caldas. Ella laboraba allí, y el primero de junio (a sus escasos 27 años), fue encontrada sin vida, la asfixiaron en su casa. Se presume feminicidio. 
Sin embargo, una semana antes, el 25 de mayo, los esfuerzos médicos por salvar a Daniela fueron insuficientes, llegó con tres puñaladas (dos en tórax y una en cuello) a la Clínica Avidanti. El ataque ocurrió en una residencia en la Calle de Las Guapas, al parecer por negarse a tener relaciones sexuales con el homicida. Tristemente su cuerpo seguía sin ser reclamado en Medicina Legal. Ambas vidas, igual de valiosas, cada una con sueños a su manera.
Pero lo más aterrador es que solo en mayo en Manizales se registraron cinco casos más de agresión contra mujeres, una de ellas en estado de embarazo, y en su mayoría con armas cortopunzantes, varios perpetrados por sus propias parejas o exparejas, ante la decisión de no querer continuar en relaciones llenas de maltrato. Este es el reflejo de una sociedad muy enferma. No quiero ni imaginarme el subregistro, el flagelo de la violencia de género afecta a toda la población, más allá de estratos socioeconómicos o niveles educativos. 
Justo en 23 de mayo el Defensor del Pueblo, Carlos Camargo, en el marco de la Gran Mesa Nacional Pro Mujeres liderada por la Defensoría del Pueblo y la Procuraduría General de la Nación, informó que en el 2022 habían acompañado 5.060 casos de violencia de género; y en lo que va de 2023, ya se habían superado los 2.000. Cabe mencionar que de 87 casos, 39 fueron feminicidios y 48 homicidios por orientación sexual e identidad de género diversas, en 2022 las mujeres transgénero fueron las principales víctimas de estos delitos. 
Con este contexto tan sombrío, desde la comunidad Mujeres Con Ideales hemos decidido aportar opiniones y soluciones, abriend espacios de conversación en torno a esta problemática de todos, con el objetivo de unir esfuerzos desde diversos sectores para aportar a la prevención de las violencias basadas en género.
El primer conversatorio, será el 29 de junio a las 4:30 p.m., en el Auditorio Carlos E. Pinzón de la Cámara de Comercio, y estará prioritariamente dirigido a empresarios. 
Ángela Salazar, mujer Confa y Cafam Caldas por su labor social con la Fundación Milagro de Abril, y una de las panelistas, afirma que: “La lucha contra las violencias basadas en género y su fatal desenlace, no puede recaer únicamente en el sector público y social; es crucial que el ámbito académico, empresarial e institucional reconozcan su responsabilidad y se sumen a este llamado de justicia y equidad. Solo juntos podremos erradicar esta gran pandemia y construir un mundo seguro y libre de violencia para todas las personas.” 
Por este motivo en el panel también estarán: Ana María Mora de la Defensoría del pueblo; Juanita Espeleta, Secretaria de Integración y Desarrollo Social; Jhoana Patiño, doctora en Ciencias Sociales, Niñez y Juventud del CINDE; y Carlos Eduardo Jaramillo, rector de la Universidad Autónoma de Manizales. 
Hoy la invitación es que nos unamos en la lucha contra el flagelo de las violencias de género. El primer paso es sensibilizarnos de la mano de los expertos y entender cuales son las rutas y protocolos a seguir en caso de que estas toquen nuestras puertas, en zapatos propios o ajenos. No queremos ¡Ni una menos!.