Hoy y otros días, a la hora del baño, piensa si dedicas tiempo a la limpieza de tu ser.
Siempre es necesaria y valiosa una purificación interior que han amado los sabios.
Sacas desperdicios de tu casa, pero ¿qué haces con
la nefasta basura emocional?
Dedica tiempo a examinarte y, sin culpas, busca ayuda para esa limpieza interior.
Elige soltar odios, rencores, culpas, rabias y tristezas que guardas quizás desde la infancia.
Esas emociones son energía que te enferma, si no las liberas con amor y en paz.
En Internet está en PDF “El gran diccionario de las dolencias y las enfermedades”.
Búscalo, lee, y decide hacer una sanación interior. Cada ser crea sus enfermedades.
@gonzalogallog