Los juegos olímpicos tienen mucho que enseñarnos sobre el arte de vivir bien.

Para ganar una medalla hay que entrenar mucho y tener una actitud mental positiva.

Por eso te amas, te valoras, y jamás dices “no puedo” “no soy capaz” o “es muy duro y difícil”.

Tienes una gran confianza en tus capacidades y sabes que tu cuerpo sigue a tu mente.

Aunque corras solo en la pista, hay un equipo de personas que te cuidan y te colaboran.

Haces todo para ganar, pero has aprendido a perder, y a hablar de aprendizajes y no de fracasos.

Tienes muy claro que todo logro se apoya en la pasión, la disciplina y la persistencia.

En el juego de la vida obtienes el oro porque eres amoroso, consciente y coherente.

@gonzalogallog