Luego de 15 años de estudio y debate que, para el tiempo geológico, de unos 4.600 millones de años, podría ser un abrir y cerrar de ojos…, un gran panel de expertos geólogos que venía estudiando la posibilidad de afirmar que habíamos entrado en un nuevo tiempo geológico en la tierra, decidieron dejarnos en el Holoceno. No estamos, pues, como muchos ya lo daban por sentado, en el Antropoceno desde mediados del siglo pasado con el lanzamiento de la bomba atómica y la consecuente radioactividad que quedó en el mundo.
El Antropoceno sería la era en la cual los cambios generados por el hombre en las condiciones geológicas serían tan profundos para cerrar el Holoceno. Si bien los expertos consideran que todavía no son tan fuertes, es bueno retomar algunos de los grandes cambios que el hombre ha infligido a la tierra.
La radioactividad generada por los experimentos y bombas atómicas. La dispersión de la radioactividad en distintos lugares y momentos ha generado una huella indeleble, imborrable. Si bien para algunos de los expertos les parecía tétrico, por las consecuencias tan negativas de los mismos, tener que poner estos hechos como apertura del Antropoceno…. Pero este es un cambio por la manipulación nuclear no se le puede dar marcha atrás, es irreversible.
Los cambios en la biodiversidad. Ha sido muy grande la caída en biodiversidad en el mundo, tanto en términos de las especies como por la destrucción de los hábitats donde vivían. Esta pérdida de biodiversidad además se ha acelerado en los últimos años. Aquí entonces estamos hablando también en términos de pérdidas de vida en la tierra para siempre. Otra consecuencia sin reversa …
Los cambios en los terrenos. Se han hecho tal cantidad de cambios que donde había valles hoy hay represas, en donde había montañas ahora hay valles, los cursos de los ríos se han cambiado, los rellenos para la disposición de residuos sólidos irrumpen en muchas zonas, los sedimentos que se han llevado a los océanos además de los conducidos por los ríos. La agricultura y la urbanización han sido las principales causas de los cambios en grandes extensiones de tierra.
El dióxido de carbono en la atmósfera. Los combustibles fósiles han sumado muchas toneladas de dióxido de carbono a la atmósfera que están generando el calentamiento global elevando la temperatura de la superficie de la tierra como la de los océanos. Y también hay otro aditamento debido a la combustión de carbón y de petróleo, que expide partículas que se convierten en sedimentos, en ríos, cuerpos de agua y océanos. Este efecto algunos consideran que ya es en buena parte irreversible.
Los plásticos y otras formas de polución. Los residuos de polvo generados en algunas producciones industriales, al igual que pesticidas utilizados en la agricultura, adicionan toxicidad a la tierra, que se suma a la producida por los plásticos, especialmente aquellos de uso único. Si bien aún de muchas acciones innovadoras en la producción, el reciclaje del plástico y la reducción de su uso, todavía hay una huella muy pesada en tierra y océanos por cuenta de ellos.
La discusión sobre los impactos de las actividades humanas en la tierra nos debe llevar a tomar consciencia de la necesidad urgente de actuar. Y que el cambio de hábitos y de maneras de producción son indispensables. No podemos seguir contaminando y utilizando más recursos naturales sin asegurar que se renueven. Esperar que el Antropoceno no sea la etapa final de la existencia de vida sobre la tierra. No podemos ser las generaciones sepultureras de la vida.