Luego de la sorpresa que dio el gobierno al solicitar cambio en la Gerencia de la Federación Nacional de Cafeteros, pues, si bien es claro que la cabeza del gremio cafetero debe tener total interlocución con el Estado, no es bueno ese precedente de vetos oficiales frente a los gremios. La Andi no quiso doblegarse cuando a Bruce McMaster lo vetaron desde Palacio, y al contrario lo ratificó anticipadamente en su cargo para un nuevo período. Los cafeteros no se podían dar ese lujo, dependen grandemente del Estado. La buena noticia es que el proceso de búsqueda del nuevo Gerente está caminando por recta senda, que el señor Ministro de Hacienda, Antonio José Ocampo, anunció en el último Comité Nacional de Cafeteros. Así, pues se podrá esperar tener un gerente o una gerente de lujo para celebrar el centenario de la Federación que estará por cumplir antes de 5 años. Hasta el 23 de febrero se pueden presentar hojas de vida para la convocatoria.
¿Cuáles fueron los puntos de la hoja de ruta para seleccionar el reemplazo de Roberto Vélez? Primero que los candidatos en la terna que se pondrá en consideración del Congreso Cafetero serán unas personas de primer nivel: Tanto como líder o lideresa, de total pulcritud en el manejo de recursos, como de probada experiencia para un cargo de tanta complejidad gremial, institucional y empresarial. Igualmente, notificó explícitamente que el Gobierno no tiene candidato, lo que es muy importante que haya la certeza que no habrá “cartas marcadas”. Un aspecto que el ministro recalcó en diversos momentos de su intervención: la proyección internacional que debe cumplir el nuevo o nueva gerente. Hizo un énfasis sobre la posibilidad que fuera un hombre o una mujer, la Federación nunca ha tenido en su historia una gerente.
Sobre el procedimiento como tal el ministro reiteró: “… no veo otra forma de avanzar en este proceso sino a través de los consensos que logremos en esta mesa para presentarles a los caficultores y caficultoras unos candidatos y candidatas que estén a la altura de sus expectativas, de la caficultura, del país y de los mercados de café…”. Lo clave del proceso es que no divida el gremio, sino por el contrario, lo fortalezca. Por ello, la invitación de Ocampo a buscar los mayores consensos es la más adecuada. La Federación tiene una incidencia muy grande en las familias caficultoras del país. Se trata de más de 550 mil familias, que han generado una ruralidad que es conocida como la civilización cafetera, que en el fondo constituyó una posibilidad digna de vida para los agricultores de café.
Los Gerentes de la Federación han sido muy significativos en la historia: Alfredo Cortázar, Enrique de Narváez, Camilo Sáenz, Alejandro López, Manuel Mejía (1937-1958), Arturo Gómez (1958-1982), Jorge Cárdenas (1983-2002), Gabriel Silva Luján (2002-2009), Luis Genaro Muñoz (2009-2015) y Roberto Vélez (2015-2023). La Gerencia tuvo una estabilidad institucional muy grande con Manuel Mejía, Arturo Gómez y Jorge Cárdenas, que le permitió una consolidación a la Federación muy grande como ente gremial y como administradora del Fondo Nacional del Café.
La Federación, los cafeteros y el país, requieren de un sector cafetero fuerte, y con gran capacidad de incidencia en el campo. Y a su vez muy dinámico en el frente internacional, aunque con el auge del petróleo y los minerales haya perdido la preminencia en las exportaciones, sigue siendo el principal producto agrícola del país de venta en el exterior.