Solo espero que sea un mal chiste, u otro de esos rumores infundados que salen del imaginario de los jóvenes que fungen como periodistas, quienes buscando los famosos "likes" publican, sin filtros, lo que se les atraviesa, o lo que quieren, y para argumentarlo lo ponen en boca de terceros.
Confío, igualmente, que no sea una campaña tendenciosa del protagonista de la historia, que no sería extraño, y me refiero a la versión difundida, viralizada utilizando términos de hoy, de que Once Caldas estaría estudiando un posible regreso de Hubert Bodhert a la dirección técnica.
A quien se le ocurre por Dios que la solución sea quien ya salió de acá supuestamente amenazado –eso dijo– con las paredes y los postes ubicados cerca del estadio llenos de afiches insultantes en su contra, pidiendo el retiro, dada su posición de continuar porque tenía contrato no obstante acumular cuatro ligas consecutivas eliminado.
Fue su nivel de incompetencia el que provocó el relevo, Once Caldas bajo su mando careció de jerarquía, no tuvo propuesta de juego, ni se notó un trabajo confiable. Perdió la final de la Copa Betplay ante un Nacional en una de las peores crisis de los últimos tiempos, y perdió todos los partidos clave que disputó.
Se fue de Manizales, y le fue mal en Águilas, de donde lo echaron antes de que causara más estragos en el actual líder, clasificado por anticipado, y favorito, gracias al desempeño posterior de Leonel Álvarez, Lucas González y César Farías. Y acaban de botarlo de Santa Fe, estando dentro de los ocho, porque entendieron que no había nada.
Sin reato ha buscado los medios para promocionarse sin rubor frente al colega que está a cargo, Hernán Darío Herrera, y algunos hacen eco, esos que se la pasan "esperando" –verbo preferido– a que las cosas cambien, cuando las decisiones provienen de los mismos dirigentes que, en cinco años, sistemáticamente, se han burlado de la afición con el armado del plantel y la escogencia del DT.
Al doctor Nicolás
Me tuvo particular aprecio, al punto de que, en tres ocasiones, seis meses antes de que convirtiera Radio Cóndor en La Patria Radio ampliando su portafolio informativo, me ofreció, con palabras en extremo generosas, encabezara ese proyecto: "Creo –me dijo– SIEMPRE FÚTBOL es el programa que necesito para apalancar la idea".
Estaba en La Cariñosa, y logré esquivar la respuesta durante un semestre, hasta que, hecho el negocio, y ante su insistencia, opté por aceptarle un espacio en la mañana, conservando el del mediodía en la otra emisora.
En pandemia, RCN rechazó una solicitud que hice de rebaja en los honorarios ante la crisis humanitaria que se vivía, y suspendieron mi contrato, corriendo de inmediato donde el Dr. Nicolás: "Si aún le interesan mis servicios, estoy disponible". No lo dudó, me estrechó la mano, y me dijo "bienvenido".
Volví a esta que ha sido mi casa, aquí comencé como redactor deportivo en los albores de mi carrera, y completo ya casi treinta años como columnista, más los tres al frente de Siempre Fútbol por los 1540 del AM todos los días a la 1:30 de la tarde.
Me acogió con atención, y fueron largas las tardes en su oficina al calor de un tinto hablando de los medios nacionales, de periodismo en general, o de Once Caldas, escuchando mis peroratas en contra del manejo directivo, que no sé si aplaudía, o consideraba radicales, sin que nunca coartara mi libertad de expresión.
Agradecimiento eterno doctor Nicolás ¡que Dios lo tenga en su gloria!
Hasta la próxima...