Desde el miércoles al mediodía comenzaron a ejecutarse las anunciadas obras de mantenimiento y reparación de pavimento en las principales avenidad de Manizales, una necesidad sentida que los ciudadanos venía reclamando desde hace meses. Los puntos de intervención son las avenidas Paralela, Alberto Mendoza, Santander y Kevin Ángel, con una inversión cercada a los $2.400 millones. Otros $1.500 millones se destinarán a reparar la malla vial del sector del Ondas del Otún.
Ya era hora de que se empezaran estos trabajos, luego de que en varias ocasiones se marcaron con pintura los huecos más grandes a lo largo de esos recorridos, y se sembró la expectativa de una pronta intervención que se demoró demasiado. Ya que comenzaron las obras, que repercuten también en complicaciones de movilidad, lo que esperamos es que se trabaje con celeridad, pero sobre todo con la garantía de que los pavimentos nuevos van a durar, que la calidad se garantice al 100%.
En la Paralela, básicamente, la intervención será en el carril Centro-Palogrande, entre las calles 46 y 52. En la Santander, en un tramo del sector de El Cable, en la Alberto Mendoza en varios puntos en ambos carriles, y en la Kevin Ángel entre Mabe y Efigás (sentido Batallón-Centro) y en la glorieta de San Rafael. La Administración Municipal apunta a atender los puntos más críticos, pero quedan pendientes otros problemas menos graves en las mismas avenidas.
Desde la Secretaría de Obras del Municipio se asegura que la ejecución no tardará más de tres meses, lo que significa que a principios de noviembre próximo los trabajos deben estar terminados de manera satisfactoria. Ojalá que sea así, porque ya vemos lo que ocurre con la glorieta de Los Cedros, por la cual se revivió el pico y placa en la ciudad hace cerca de dos meses, y que todavía no tiene avances significativos. Ni qué decir del Bulevar de la 48, sector de Coldeportes, que debió ser terminado hace meses.
Frente a los problemas de movilidad inevitables por el desarrollo de estos trabajos, el plan presentado para controlar el tráfico y darle fluidez debe ser implementado con mucho cuidado, brindando alternativas viales, y sobre todo con la presencia de personal de tránsito que ayude a evitar congestiones. Hay puntos neurálgicos que en horas pico se vuelven muy lentos para moverse en vehículos y que necesitan estrategias que ayuden a que fluya de manera segura el tráfico vehicular.
Para una ciudad de vías escasas y estrechas como Manizales debe ser prioritario mantener sus vías principales en buen estado, sin dejarlas deteriorar tanto como lo ocurrido en esta ocasión. Inclusive, los ciudadanos perciben de mejor manera una administración que le dé prioridad a resolver todos aquellos problemas que afectan a las mayorías, las cuales, sin duda, se mueven todos los días a sus trabajos, hogares y lugares de estudio por las avenidas de la ciudad.