Todo indica que los cuatro alcaldes del Área Metropolitana del Centrosur de Caldas no se han quedado quietos después de quedar conformada esta figura de integración regional. En ella están depositados anhelos y esperanzas para mejorar condiciones de vida, resolver problemas que se volvieron comunes en los cuatro municipios y apalancar juntos la ejecución de proyectos de desarrollo, que fue por lo que votaron 61.685 ciudadanos el 26 de noviembre del año pasado, cuando se les convocó a las urnas para decidir si querían que se creara.
Esta semana hubo un primer consejo de gobierno entre los alcaldes de Neira, Manizales, Palestina y Villamaría como integrantes del Área, en el que aseguraron que producto del trabajo de varios meses ya existen los estatutos, que se encuentran para la aprobación del Ministerio del Interior y obtener la personería jurídica, luego nombrar un director y ahí deberán venir las primeras acciones. También tranquiliza que no quieran iniciar creando burocracia. La idea es valerse de los equipos técnicos de las cuatro alcaldías para que ayuden a resolver retos administrativos y jurídicos que se puedan presentar en el arranque. Pueda ser que así lo mantengan y que solo acudan a contratar personal cuando ya tengan proyectos caminando, no desde el comienzo.
Importante también que estén dedicados a articular los cuatro planes de desarrollo municipales para estructurar el Plan de Desarrollo Metropolitano, que será la ruta para lo que se viene como Área. Bien orientados si están contemplando que dicho Plan priorice líneas en movilidad, infraestructura, social e institucional. La movilidad el asunto más esencial y urgente para los cuatro territorios, y por lo menos ya hay un pensamiento común en torno a que se debe tener un sistema integrado de transporte que le permita a la población movilizarse con el pago de un solo pasaje entre municipios, sin afectar a las empresas de transporte, que serán llamadas a construir conjuntamente dicho sistema.
Si se mejoran las condiciones y los costos de la movilidad, incluyendo cosas como paraderos, rutas y frecuencias, se convertirá en la mejor carta de presentación del Área Metropolitana ante la sociedad. Así ocurrió en la del Valle del Aburrá en Antioquia, y las buenas experiencias son para replicarlas. Villamaría, Neira y Palestina consideran que esto mejoraría el acceso a servicios de educación, salud, servicios públicos e institucionales que se comparten con Manizales como capital. Incluso para este tema se debería buscar desde lo jurídico la posibilidad de incluir de alguna manera a Chinchiná, que no logró entrar por voluntad ciudadana al Área Metropolitana, pero está en medio de cualquier decisión que se tome.

También están pensando en trabajar en seguridad, cultura y turismo, claves para salir a mostrar y vender nuestras bondades como subregión de Caldas; especialmente para Palestina que tiene su fortaleza en el turismo. Ahí habrá excelentes oportunidades de negocios y de proyectos comunes, desde que se sepan establecer y encausar. Los alcaldes también hicieron anuncios de aportes económicos para el Área. Manizales, como capital, participaría con $250 millones; Neira, Palestina y Villamaría con $50 millones cada uno, y la Gobernación anunció que se comprometerá con una suma igual para contratar estudios para estos proyectos. Lo más importante es que se conserve esta sintonía entre los cuatro municipios y que empiecen a actuar juntos pronto.