Parte de los recursos de la Nación aprobados para Ciencia, Tecnología e Innovación se siguen destinando a proyectos de emprendimiento, que muy poco tienen que ver con estas áreas, denuncia la representante a la Cámara por Bogotá Jennifer Pedraza. Pero si en el país llueve, en los territorios no escampa. Le acaban de llamar la atención al rector de la Universidad de Caldas, Fabio Arias, por concentrar esfuerzos y recursos en su proyecto de regionalización, dejando en un segundo plano los requerimientos de la sede central en Manizales.
Arias llegó al cargo en diciembre del 2022 con el plan de construir y abrir sedes en municipios diferentes a la capital. Eso siempre lo hemos destacado como acierto para la región, porque promete pasar de 13 mil estudiantes matriculados a 18 mil y hay una apuesta fuerte en infraestructura educativa para las sedes en La Dorada, Aguadas, Anserma (que está en desarrollo) y el reforzamiento estructural de uno de los edificios en Manizales.
Si la Universidad de Caldas dio el paso a desconcentrar su oferta, es porque seguramente está preparada y tiene asegurados el funcionamiento y el sostenimiento de todos los programas académicos y todas las sedes en Manizales. Esto incluye el bienestar estudiantil, el cuerpo docente, el mantenimiento de los espacios, los equipos; en fin, una lista larga de deberes que tienen que haber quedado verificados y garantizados para seguir operando sin contratiempos. También debe ser motivo de revisión de la Rectoría las condiciones de las dimensiones cultural y artística; que son igual de necesarias a las de infraestructura y de contratación de personal que es donde estaría la concentración.
La regionalización de la Universidad de Caldas debe servir para fortalecer la educación pública, convertirse en ejemplo para los demás departamentos de Colombia, por eso no puede haber descuidos, ni favorecimientos. También debería este ejercicio abrirse al aporte de la educación privada, que en Manizales ha trabajado de la mano con la pública con resultados muy positivos y de mostrar a nivel nacional. No puede cerrarse esta experiencia de la U. de Caldas, que tiene apoyo nacional, para acceder a réditos personales. Por el contrario, debe ser receptora de ideas de su propia comunidad educativa y de actores externos para resolver y mejorar si es que se necesita.
Entre más gente haya pensando en la educación, reflexionando y trabajando, mejores resultados se obtendrán y se evitará caer en errores como los que están afectando al Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación, que son motivo de denuncia nacional. La regionalización debe redundar en beneficios institucionales. La Rectoría habla de haber iniciado obras en 26 puntos de las sedes en Manizales, quizá también esté haciendo falta comunicar los avances y los planes para convertirlos y que se sientan como logros comunes.