El inicio del 2023 parecía dejar para la historia la dura época de confinamientos y restricciones a las que obligó la pandemia por covid-19, en medio de la cual el turismo fue de los sectores más afectados. La población se abstuvo de viajar y recrearse. Un análisis de la Fundación Universitaria del Área Andina señala que el sector turístico en el 2020 sufrió una pérdida de $20,1 billones, que representó el 1,5% del PIB del país, y lo compara con el primer trimestre del 2019 cuando, según cifras del DANE, 12,4% de la población hizo turismo interno, viajes en los que cada persona gastó en promedio $72 mil 517 diarios.
Esa tendencia a la baja continuó entre el 2021 y casi todo el 2022, cuando hacia el último trimestre empezaron a desaparecer los condicionamientos de la emergencia sanitaria. El turismo y todos los que derivan su sustento de esta actividad empezaron a reponerse. La gente volvió a viajar y el gasto regresó. Pero este año, cuando todo parecía ir encaminado a la recuperación, en marzo hubo dos golpes: el cierre de las aerolíneas Viva Air y Ultra Air, que dejó a miles de viajeros con las maletas listas y los tiquetes comprados a diferentes destinos, y luego se produjo el cambio de nivel de actividad del Volcán Nevado del Ruiz, que marcó negativamente a Caldas y a Tolima. Muchísimo daño ha hecho la mala y falsa información que circula sobre los efectos de una probable erupción del volcán, que nadie sabe cuándo será. El Ruiz es el volcán más monitoreado en Colombia y eso, que se ha hecho con rigor científico, permite dar un parte de tranquilidad. Fuera de la zona de influencia del volcán, delimitada en mapas elaborados por expertos del Servicio Geológico Colombiano, no hay que temer. A los 27 municipios de Caldas y a los 47 de Tolima se puede viajar, solo que hay restricciones y se debe tener cuidado al visitar áreas de los que están dentro de los 15 kilómetros del volcán. Si quiere visitarnos, empaque tapabocas y gafas, lo que necesitaría en caso de erupción ante la caída de ceniza volcánica que sería lo único que llegaría.
El que sí está en alerta roja es el turismo en Caldas. El Sistema de Información Hotelero de Cotelco reportó una fuerte caída durante abril en el porcentaje de ocupación, pasando de 49% en Manizales para el mismo mes del 2022 a 37% este año, y en todo Caldas la variación fue de 48% a 35% entre ambos años. A corte del 20 de abril, Cotelco Caldas calculó pérdidas del sector hotelero de Manizales en unos 2 mil 900 millones de pesos, a los que también suma la desaparición de empleos directos e indirectos. Ya venían golpeados por el aumento del IVA a un 19% en hotelería y tiquetes aéreos; además, todos los prestadores de servicios turísticos que están en esos 15 kilómetros del área de influencia del volcán tuvieron que cerrar.
Cotelco hizo un llamado al Gobierno nacional para buscar soluciones a esta grave situación. Acudir a aplicar exoneraciones tributarias sería una salida para mitigar la falta de recursos, también diseñar programas especiales para la protección de los más afectados en estos departamentos pensando en actividades alternas mientras se define la situación del Ruiz; pero especialmente ejecutar campañas de difusión muy fuertes, cargadas de datos reales, precisos y didácticos sobre el volcán, que acaben con miedos infundados de quienes buscan es sembrar zozobra.
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