Hay que reconocer las buenas gestiones, a todo señor, todo honor, como se dice en esta tierra. Los 10.000 millones de pesos que anunció hace 18 días en Villamaría el ministro de Tecnologías de la Información y Comunicaciones, Óscar Mauricio Lizcano Arango, son el aporte del Gobierno nacional para empezar a cimentar en Caldas el Centro de Operaciones de Ciberseguridad de Colombia. Con esta idea llegó Lizcano hace ya casi tres meses, ninguno de los minTIC que lo antecedieron había puesto los ojos en el departamento para impulsar este tipo de iniciativas que, bien trabajadas y gestionadas, pueden llegar a representar una nueva vocación para la región.
El Centro de Ciberguridad necesita por lo menos 50.000 millones de pesos para operar plenamente, indicó el ministro cuando anunció el proyecto, y la tarea es ir buscando y sumando recursos nacionales e internacionales, que les queda a las administraciones salientes y sobre todo a las entrantes para no dejar perder estos dineros de la Nación. Otros avances importantes para cristalizar la idea es la sede que ya se destinó en el Parque Tecnológico de Villamaría, y la entidad que estará a cargo de su ejecución, el Centro de Bioinformática y Biología Computacional (Bios) que se convierte en prenda de garantía por el conocimiento y la experiencia acreditada para operarlo.
Todo parece estar dado para que esa central de Ciberseguridad no sufra algún traspié. Lizcano también anunció que ya habían girado los 1.500 millones de pesos que prometió en mayo para poner en marcha el supercomputador donado a Bios por el Gobierno chino y que servirá como herramienta. Además sumó otros 4.000 millones de pesos para una estrategia de formación, clave para poner a tono el recurso humano en estos temas. Lo que hará este Centro es simular ataques controlados por hackers y revisar en tiempo real las vulnerabilidades digitales de empresas y entidades del Gobierno, funciones nada sencillas en tiempos en los que la seguridad informática está sometida a grandes riesgos y por donde el delito está ingresando.
El Centro Cibernético de la Policía Nacional reportó que en 10 meses del 2022 -enero a octubre- recibieron 54.121 denuncias por ciberataques en Colombia, lo que arroja un promedio de 5.412 por mes y ubica al país como el tercero con mayor número de estos ataques en América Latina, después de México y Brasil. Los datos, públicos y privados, se convierten en este contexto en un activo principal para gobiernos, instituciones y empresas, de allí que se tengan que proteger y ahí estará sirviendo este Centro de Ciberseguridad. Por eso es que se ve como una nueva vocación para Caldas, aquí hay personal, avances y material para hacerlo.

En Caldas, muchos llevan años trabajando en temas tecnológicos, algunos con exportación de servicios en sus portafolios, y consideran que este Centro podrá ser el principio de algo transformador para el área de seguridad informática y el ecosistema de tecnología de la región. Si ese es un camino para generar empleo cualificado, no hay que temer transitarlo, más bien apostarle todo y tratar de extenderlo al sector privado, las empresas hoy buscan proteger su dinero al estar expuestas a ataques cibernéticos, lo mismo sirve para todas la áreas económicas, incluyendo la agricultura que ha sido un renglón de importancia para el departamento. Según Bios, el Centro estaría poniendo en marcha sus servicios en diciembre, ojalá esos plazos no se extiendan. Es una oportunidad que no nos podemos dar el lujo de desaprovechar.