Cada persona tiene una forma única de aprender y relacionarse con el mundo. En el campo laboral hay quienes se desenvuelven mejor desarrollando una función, otros se tardan más en aprender o ni siquiera disfrutan lo que hacen. Conocer previamente cuáles son las fortalezas y aspectos a mejorar de una persona garantiza que tenga mayor éxito laboral.

Para lograr este objetivo existe THT: Predecimos el Comportamiento Humano, una compañía multilatina de origen colombiano con 16 años de experiencia en predecir el comportamiento humano e identificar la zona de genialidad de las personas. Gracias a su metodología y por medio de pruebas estandarizadas hace posible descubrir 200 aspectos de la personalidad en 24 horas.

Tiene presencia en 13 países, un equipo base de más de 70 personas, en su mayoría ingenieros de sistemas y psicólogos, más de 12 mil directivos entrenados y más de 3 millones de personas evaluadas en las cerca de 1.300 organizaciones en las que ha desplegado sus servicios para hacer selección, desarrollo y alineación del personal.

“Tenemos una metodología simple y potente a través de la que podemos leer el perfil del ser humano en cuatro tipos de colores. Así encontramos lo positivo de cada una y entendemos dónde tienen mayores posibilidades de éxito”, explica Juan David Gómez, fundador y líder de Negocios & Tecnología de THT: Predecimos el Comportamiento Humano.

Gómez es el autor del libro “El lenguaje de los colores” en el que se reúne el marco conceptual del “Método de los Colores” que, acompañado de la parte instrumental permite conocer a los candidatos para la contratación en una empresa. Para él, lo que hace THT es “volver coqueta y amigable la teoría para entender a las personas, de modo que puedan desarrollar su potencial y ser más productivas y felices en el trabajo”.

¿Cómo leer a la gente en colores?

Existen cuatro perfiles básicos en los que puede encajar cualquier individuo. En el perfil rojo se ubican las personas que son activas y racionales y, por lo tanto, están orientadas en obtener resultados. Se desempeñan bien cuando tienen que trabajar bajo presión, aunque pueden ser impacientes.

Las personas de perfil amarillo son activas y emotivas. Se caracterizan por ser sociables y disfrutan de relacionarse con los demás. Sin embargo, su atención puede estar más dispersa.

Quienes se ajustan al perfil verde son, en cambio, personas pausadas y emotivas. La afabilidad, la capacidad de escucha y el servicio son algunas de sus características. En su contra les puede jugar la indecisión.

Finalmente, el cuarto perfil es el azul que representa a seres humanos pausados y racionales. Ordenados, metódicos, atentos a los detalles pero que pueden ser incrédulos y difíciles de complacer.

Cada uno de los perfiles tiene potencialidades y aspectos por mejorar. No hay uno que sea mejor o peor, sino que tienen características que los hacen adaptables a diferentes lugares y propósitos.

“Nosotros no evaluamos sino que valoramos al ser humano. Evaluar es decir si alguien es bueno o malo. En cambio, al valorar ayudamos a que la persona reconozca en qué le va bien y en qué no tanto. Y esa es la información que necesitamos para evolucionar”, amplía Gómez.

El proceso de pruebas THT

Cuando THT va a implementar unas pruebas de competencias, su primer paso es construir un perfil ideal. Responde a la pregunta de cuáles son las características que debe tener una persona si está aspirando a un cargo como médico, contador, asesor comercial o cualquier otro.

Para predecir el comportamiento humano, un algoritmo construye 15 preguntas para cada vacante y determina qué elementos de cada perfil requiere el cargo. Una persona puede tener elementos de cada uno de los colores, aun así, uno de los perfiles va a ser el predominante.

El segundo paso es preguntarle a las personas frente a cuatro adjetivos con cuál se identifica más. Cada uno de ellos está vinculado a uno de los colores.

“El algoritmo le pregunta a la persona 30 veces lo mismo. Así valida que no sea manipulado, que no se contradiga y que sea consistente en su respuesta y va eliminando el margen de error con una confiabilidad del 90 %. Con las respuestas es posible acceder al porcentaje de ajuste que tiene la persona con el puesto”, explica Gómez.

Finalmente, se analizan otras facetas con técnicas psicométricas. Se determina el nivel de inglés, la inteligencia, los valores, las competencias digitales, la inteligencia emocional, la capacidad de liderazgo y de ventas. Una oportunidad para tomar las mejores decisiones para la vinculación de un postulante a la organización.

Herramienta Predictor

Con el propósito de seguir evolucionando y contribuir a los procesos de talento humano, el más reciente lanzamiento de THT es la tecnología Predictor, la que, de acuerdo con la Ley Habeas Data captura toda la información disponible de una persona. A través de ella, las empresas pueden descubrir de un postulante aspectos como su trayectoria, su comportamiento en redes sociales, las percepciones que tienen sus antiguos empleadores, entre otras.

Así, en un solo tablero, las organizaciones pueden acceder a la información autorizada del entorno sumada a los resultados de los test, en los que se pueden conocer más de 200 aspectos de quien se postula a la empresa. Una herramienta que, además de tener una gran responsabilidad por el manejo de datos, da un paso adelante en los procesos humanos y en cómo desarrollar el potencial de los trabajadores.

Para conocer más sobre los servicios de esta empresa, visite su web site: https://contenido.tht.company/predictor