INSTITUCIONAL

780 toneladas de dióxido de carbono al año dejará de emitir Manizales a la atmósfera una vez esté en movimiento la Línea 3 del Cable Aéreo. Se trata de una estrategia de movilidad que, además de ayudar a frenar el cambio climático, solucionará las dificultades topográficas que presenta la ciudad en sentido sur – norte. Tendrá la capacidad de movilizar 12 mil pasajeros por día de manera inclusiva y con un enfoque de género, hasta ahora, único en el país en un sistema de transporte público.

Actualmente, la Alcaldía de Manizales trabaja en la ingeniería y planos de detalle. 60 cabinas y cuatro estaciones están ya en proceso de construcción para poder llegar de Los Cámbulos a El Cable en tan solo 11 minutos, sin trancones, sin riesgos de accidentes de tránsito y sin necesidad de tomar nuevas rutas. La Línea 3 es una de las cinco líneas que conforman el Diamante de los Cables, gracias al cual el Gobierno Nacional decidió cofinanciar el Sistema Integrado de Transporte Público. “El cable aéreo es un sistema de movilidad que cuenta con diversas bondades, como bajo requerimiento predial, energía limpia y eficiencia; su costo financiero es moderado y además ayuda a mejorar la calidad de vida”, señaló el alcalde Carlos Mario Marín.