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EFE | LA PATRIA | Bogotá
Una encuesta de Invamer, Andi y Más País realizada a través de 2.700 consultas y que da una radiografía del parecer ciudadano ante la posible reforma a la salud que quiere presentar el Gobierno nacional y de la que aún no se conoce demasiado, pero que pretende hacer un sistema más controlado por los entes públicos en vez de por las actuales Entidades Prestadoras de Salud (EPS) privadas calentó el debate ayer.
El 67% de los colombianos no están de acuerdo con pasarse a un sistema de salud público, como plantea el Gobierno en la reforma al sector, a pesar de que más del 90% cree que el actual modelo de atención sanitaria requiere cambios.
Así, a pesar de que el 32% de los encuestados considera que debería cambiar totalmente y el 58% que habría que hacerle algunos ajustes, la mayoría no están de acuerdo con eliminar las EPS, a las que los trabajadores contribuyen con sus salarios y a las que se accede a través de copagos.
Así, el 63% de los encuestados se muestran en desacuerdo con la eliminación de las EPS y que su función sea ejecutada por una entidad pública y un 67% no está de acuerdo con pasar a un sistema público.
Además, más de la mitad de las personas encuestadas ven con preocupación que los recursos para la salud sean administrados por entidades públicas nacionales o territoriales.
Buena percepción del sistema actual
A pesar de esta petición de cambios, el 73% de los encuestados ven excelente (34%) o aceptable (39%) el actual sistema de salud, que además de las EPS incluye un sistema subsidiario al que se pueden afiliar quienes no llegan a la contribución mínima para garantizar supuestamente el acceso universal a la salud.
De hecho este régimen subsidiado tiene mejor aceptación (el 62% lo ven excelente) que el contributivo (el 58% lo ven excelente).
Del sistema actual, el 83% de los encuestados están de acuerdo con que el Estado pague la atención de salud y el 76% con la atención del personal médico. Lo que peor ven es la oportunidad en la asignación de citas médicas y la facilidad para acceder a ellas.
Por lo que los cambios que se piden, según esta encuesta, radican en una mayor agilidad para ser atendidos, la atención del personal y muy por detrás, más centros hospitalarios.
Petro critica la encuesta
El presidente, Gustavo Petro, cuestionó la veracidad sobre la encuesta de Invamer y los resultados por la población encuestada. "¿Saben cual es el mayor problema de una encuesta de salud? Que quienes murieron pudiendo ser atendidos y sobrevivir, no pueden ser encuestados. En la franja de la población que pide el cambio, están quienes pudieran morir sin ser atendidos. ¿Qué les decimos?", escribió en su cuenta de Twitter.