LA PATRIA | Manizales

Estos días de fuertes cambios climáticos en Manizales, representan una amenaza para la salud auditiva de los menores de edad, más si están escolarizados. Esos pasos intempestivos de calor a frío o viceversa (estén en interiores o exteriores) y esa convivencia con otros pequeños, los pone en peligro y los convierte en blanco fácil de virus de alta circulación, que pueden ocasionar dolor a este nivel.

Si ya hablar de afecciones gripales supone incomodidad, esas sumadas a estos dolores, hace que la situación sea más difícil de llevar. Puede ser una experiencia bastante incómoda y preocupante para los padres.

Multicausal

Gloria Corredor, otorrinolaringóloga adscrita a Colsanitas, abordó -para los lectores de LA PATRIA- las preguntas más comunes que les surgen a los progenitores sobre cómo ayudar a los pequeños en estos cuadros médicos.

Corredor pidió calma a los padres y los instó a buscar ayuda médica, en el menor tiempo posible. Vale recordar que ante estas emergencias, la automedicación no es buena (menos si son antibióticos). Por el contrario, puede empeorar todo.

"El dolor de oído puede tener múltiples causas, puede ser una infección del oído medio, un líquido en el oído, otitis del nadador, cera atascada, un problema dental y hasta ser producido por un dolor de garganta. Es por ello que se debe estar atentos a las señales de advertencia que los niños puedan manifestar".

Manifestaciones

Los síntomas de advertencia de que el dolor de oído en un niño puede requerir atención médica inmediata, según Corredor, son la fiebre alta y un drenaje de pus o sangre por los oídos. También el dolor persistente, a pesar de medicamentos analgésicos de libre venta; y la pérdida auditiva en uno o ambos oídos.

"No se recomienda el uso de remedios caseros, sin la aprobación de un profesional de la salud. La aplicación de calor local es la única medida segura: se puede colocar una bolsa de calor o una botella de agua tibia (envuelta en una toalla) sobre el oído afectado, evitando el contacto directo con el calor o líquidos calientes".

La otorrinolaringóloga advirtió que no se deben realizar prácticas con velas derretidas, ajo, leche materna o vinagre. Tampoco la limpieza con copitos de algodón, pues estos lo único que hacen es agravar el dolor y causar lesiones irreversibles en este órgano.

Tenga en cuenta

El dolor de oído genera irritabilidad, lo que llega con un sueño poco reparador. El niño(a) no puede descansar lo suficiente, pues se despierta de manera intermitente por los picos de dolor. En cuadros de dolor auditivo es conveniente mantener a los niños hidratados.