Foto | Superintendencia Nacional de Salud | LA PATRIA / Funcionarios de la Superintendencia Nacional de Salud registraron, uno a uno, los usuarios que llegaron al Hotel Benidorm.
El testimonio de Jesús Fernando Giraldo Alzate, de 80 años, abrió ayer en Manizales el evento Diálogos con la Supersalud*, espacio que el órgano de control propicia por Colombia para verificar que se le cumpla, en cuanto a servicios a los usuarios del sistema.
Él abogó por su situación. Su tutela cumplió cuatro años y medio, con 20 desacatos; dos con multa y arresto para los directivos de su aseguradora (Nueva EPS). Pide -desde hace años- un tratamiento juicioso de odontología neurofocal, las prótesis dentales adecuadas para dos molares y manejo del dolor.
Como él, otros pacientes, acudientes, veedores en salud, directivos de EPS y autoridades locales se reunieron en el bloque de eventos del Hotel Benidorm para desarrollar la agenda. El encuentro sirvió para la conducción de cada afectado a la Sala de Soluciones Inmediatas, en el edificio principal del lugar de hospedaje.
En esta segunda posición, personas como Giraldo encontraron a funcionarios de servicio al cliente de las entidades que funcionan en la ciudad y el departamento. Los últimos tenían la instrucción explícita de responder positivamente a los requerimientos. La consigna de Ulahí Beltrán, superintendente Nacional de Salud, era que no dejaran ir a los solicitantes hasta que les resolvieran.
La neuralgia facial atípica por la que hoy sufre Giraldo, según él, es producto de un mal tratamiento de conductos dentales que le practicaron en la misma EPS. Señaló que padece dolores indescriptibles, que hoy vive con fibromialgia, neuropatía de miembros inferiores, depresión e insomnio.
"Me han mandado a seis IPS distintas, iniciando los tratamientos e interrumpiéndolos. Este año tuve cinco sesiones de terapia neural en Armenia, pero el 23 de agosto me mandaron otras cinco y no me las autorizaron", mencionó el adulto mayor.
A él se le escuchó, terminando la mañana de ayer, que ya le habían aprobado los viáticos. Seguían gestionando las terapias referidas, el abordaje por odontología y sus prótesis (antes le habían dado una, pero quedó mal hecha).
"Un tratamiento interrumpido no sirve. Esto ha sido la cosa más desfavorable. No puedo dormir del dolor, me la paso acostado a un cojín", criticó el hombre que, al cierre de esta edición continuaba en la Sala de Soluciones.
De las responsabilidades
Beltrán, que dirigió sus críticas y reclamos hacia los representantes de las EPS que se hallaron en la reunión principal, fue enfático en pedirles a los pacientes que se sintieran cómodos y en derecho a exigir el servicio a las EPS, que funcionan con el dinero de cada uno de los usuarios.
"No puede haber ni complacencia ni tolerancia con quienes tienen hoy la administración de los recursos. Queremos salvar vidas, no poner sanciones. Pero sí para salvarlas tenemos que ponerlas, lo vamos a hacer. Nosotros hacemos inspección, vigilancia y control. Quien comete una falta, debe asumir su responsabilidad", dijo Beltrán, mirando a los representantes de Sanitas, Salud Total, Sura, Nueva EPS, Famisanar y a los directivos de regímenes especiales como Cosmitet (Magisterio), la Policía Nacional y otras fuerzas públicas.
El superintendente habló del disgusto, por parte de las EPS, cuando se les ponía en cintura. Advirtió que seguiría en esa tónica por lo que durara su estadía en la entidad, toda vez que para ello lo habían puesto ahí.
Insistió que, por omisión, no iba a ser sancionado: "Tengo que actuar y proceder para proteger el derecho a la salud y para cuidar de los recursos públicos", expresó Beltrán, poco antes de mencionar que la reforma a la salud era necesaria.
Mientras se llevó a cabo la jornada, los comisionados de las aseguradoras respondieron las reclamaciones que hizo Beltrán por las intervenciones de los usuarios. Cada uno se llevó tareas para ejecutar para la mejora del servicio.
Ayer ellos estuvieron en el banquillo de los acusados. El encuentro terminó con una medida cautelar para Salud Total, por el caso de José Alexánder Duque, un paciente que empezó con un dolor en el cuello y al que su aseguradora, meses después, sigue sin responderle a cabalidad. Su caso se clasificó como riesgo vital. Le deben responder en menos de 24 horas.
* Superintendencia Nacional de Salud (SNS).
Contacto
Si se perdió el evento y tiene alguna queja en salud con su EPS, quéjese ante la Superintendencia Nacional de Salud. Esto en la línea gratuita 018000 513700 o en www.supersalud.gov.co
En representación de los usuarios
Olga Piedad Cárdenas, veedora en salud de la ciudad, también tomó la palabra en Diálogos con la Supersalud. Habló de las generalidades por las que se quejan, a diario, los usuarios que representa.
Lamentó, sin embargo, que no asistieron más personas al espacio: "Debió asistir más gente en un municipio de casi 500 mil personas. Se quejaron 98 usuarios, les solucionaron a 82 de ellos. Los otros siguen en proceso".
Cárdenas subrayó que encuentros de este tipo permiten el acercamiento con la institucionalidad. Criticó que se le hable tanto a la gente de la reforma a la salud, sin permitírselos a ellos (los veedores), voz y voto en dicha discusión.
Foto | LA PATRIA
Jesús Fernando Giraldo Alzate, de 80 años; mientras le exponía su caso a la mesa principal que presidió Ulahí Beltrán, superintendente Nacional de Salud. Él estuvo acompañado por funcionarios de la salud departamental.