El último aporte que recibió el Cuerpo de Bomberos de manos de la Alcaldía de Marulanda fue en el primer semestre del 2020, cuando obtuvo $3 millones para fumigaciones durante la pandemia.

Luego, el alcalde de la época, Juan David Grajales, pretendió darles la misma cantidad para el segundo semestre, a lo que se negó el comandante, Jorge Iván Henao.

Fue un rifirrafe lleno de acusaciones de lado y lado que llevó a que el municipio estuviera prácticamente desprotegido, pues las emergencias las atendían los voluntarios por sentido de pertenencia, que incluso perdieron el único carro en un accidente de tránsito.

Pasaron cuatro años para que la entidad volviera a surgir, pues de acuerdo con el capitán Jairo Alarcón, delegado departamental de Bomberos, desde el pasado fin de semana se iniciaron las capacitaciones con 14 miembros.

“Estamos organizando todo para luego nombrar al comandante y la junta de dignatarios para que puedan contratar con la Administración municipal. Se capacitan en comando de incidentes, gestión y administración y formación. Será por cuatro meses y en diciembre, o antes, podrían estar laborando”, manifestó Alarcón.

Aunque se barajaron opciones, como que una entidad de un municipio vecino asumiera el compromiso, no se llegó a ningún acuerdo con los alcaldes. Sin embargo, el que sí decidió asumir el reto fue Leonardo Giraldo, quien llegó como mandatario en enero de este año.

El municipio aporta los recursos para las capacitaciones y el delegado departamental adelanta gestiones ante la Dirección Nacional para poder volver a contar con un carro.

Actualmente disponen de equipos de protección, herramientas forestales, un dron y una moto.

A investigar

Jairo Alarcón sostuvo que se solicitó a la Alcaldía de Marulanda investigar sobre el destino del dinero de años anteriores, así como saber qué pasó con los recursos de la sobretasa bomberil.