La Corte Suprema definió que el proceso que se sigue contra Róbinson, por extorsión agravada, es competencia del Juzgado Quinto Penal Municipal con Función de Conocimiento de Florencia (Caquetá) y no del Juzgado Once Penal Municipal con Función de Conocimiento de Manizales.

De acuerdo con el escrito de acusación, a mediados del 2018 las víctimas denunciaron ante la Fiscalía que fueron contactados a través de llamadas telefónicas por supuestos miembros de las disidencias de las Farc, quienes les exigieron unos medicamentos para integrantes de dicha organización que se encontraban enfermos y/o heridos y que de no colaborar se atendrían a las consecuencias.

Se les indicó que las medicinas tenían un determinado valor y debían entregarse a un médico de nombre Róbinson Soto Zapata, con quien los denunciantes sostuvieron conversaciones telefónicas y les manifestó que "ya había hablado con el comandante y tenía los medicamentos listos", por lo que debían consignar el dinero y luego dirigirse al Hospital María Inmaculada, de Florencia (Caquetá), a recoger los fármacos para que hicieran la entrega al supuesto comandante de la organización criminal.

"Los pagos o giros se realizaron a nombre de Soto Zapata por valor de $1 millón 213 mil (2 veces) y $840 mil. Luego de indagar en el centro asistencial, se les informó que no existía ningún médico que correspondiera a ese nombre, por lo que presentaron la denuncia tras advertir el engaño.

Al supuesto médico procesado lo aprehendieron en Manizales el 13 de septiembre del 2018, de donde es natural.

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