La Universidad Nacional sede Manizales tiene previsto regresar a clases a partir del próximo lunes 22 de julio. El retorno será luego del cese académico que se inició en marzo.

La anormalidad obedece a la protesta estudiantil generada ante el inconformismo con el nombramiento el 21 de marzo, por el Consejo Superior Universitario (CSU), de Ismael Peña como rector general de la Universidad Nacional de Colombia, tras la consulta con profesores, estudiantes y egresados.

Luego, el CSU nombró como rector a Leopoldo Múnera, que era el favorito de los estudiantes. Sin embargo, las clases siguen pendientes de reactivarse, pues en este momento se cumple una etapa de negociaciones.

Precisamente los directivos de la institución en la capital de Caldas convocaron a los profesores para un encuentro que se cumplirá este miércoles.

La cita será en el Auditorio Principal, bloque K, del Campus Palogrande, a partir de las 9:00 de la mañana.

“El equipo directivo de la sede Manizales convoca a los docentes de la sede, independientemente del tipo de vinculación, a participar de un espacio de diálogo y reencuentro en el que además se presentará el programa de gobierno de la nueva Rectoría”, se indica en la convocatoria.

Las negociaciones

El propósito de la Universidad es seguir su camino a la reactivación de labores, las cuales se interrumpieron en la semana siete, es decir, aún faltan nueve para completar el calendario académico del primer semestre 2024.

Carta de la Vicerrectoría

"El sábado pasado la Vicerrectoría de la Universidad Nacional sede Manizales, envió la siguiente carta abierta a la comunidad universitaria:

El miércoles 26 de junio se instaló la mesa de diálogo y negociación de la Sede Manizales. A ella asistieron los delegados de la asamblea multiestamentaria, constituida por estudiantes (incluyendo a representantes de quienes han ocupado los edificios del Campus Palogrande), docentes y administrativos, por un lado, y el equipo directivo de la Sede, por otro lado.

El propósito de esta mesa es el establecimiento de acuerdos que permitan superar la crisis que vive la Universidad y retornar al normal desarrollo de las actividades académicas.

En esta administración, tanto en el nivel nacional como de sede, se ha dicho que el diálogo y el respeto son valores medulares. Reconocemos la lucha de una parte de los miembros de la comunidad universitaria por la equidad y la calidad académica. Para la Universidad es esencial la deliberación y el intercambio de ideas, es por esto que los universitarios, por definición, tramitan sus diferencias a través del diálogo.

En la primera reunión de la mesa se formalizó la entrega de los dos pliegos de garantías.

El pliego de la Dirección de la Sede tuvo dos exigencias: el respeto a todos los miembros de la comunidad universitaria y la entrega de los edificios del Campus Palogrande.

Se acordó que la negociación comenzaría por lo más urgente (las garantías académicas).

La Vicerrectoría de Sede aceptó la totalidad de las garantías a nivel de sede presentadas por los delegados de la asamblea multiestamentaria, que inicialmente eran las garantías académicas, y en desarrollo de los diálogos se solicitó incluir las de bienestar.

Igualmente, se comprometió a gestionar en el nivel nacional todas las peticiones que correspondan a ese ámbito. Muchas de ellas exigen destinaciones presupuestales significativas, como son la contratación de docentes ocasionales para las 9 semanas de recuperación de clases y las 2 semanas de adaptación y repaso (que superan los mil millones de pesos en la Sede Manizales).

Esos acuerdos preliminares se refrendaron en la reunión del jueves 27 de junio. Durante la negociación se dejó claro que la condición de la Vicerrectoría de Sede para la implementación inmediata de las garantías es la finalización de la ocupación del bloque D del campus Palogrande.

Esto es una necesidad perentoria porque se requiere adelantar la contratación de los docentes ocasionales que, no sólo exige unos tiempos mínimos para el retorno a clases el 22 de julio, sino que también se ve afectado por las vacaciones administrativas y docentes entre el 5 y el 19 de julio de 2024.

Adicionalmente, los trámites para el cumplimiento de los demás puntos del pliego requieren del acceso a sus puestos de trabajo de los empleados que laboran en dicho bloque.

Cabe destacar que, para el cumplimiento de los fines misionales de la Universidad, es indispensable que los administrativos, estudiantes y profesores puedan acceder a los edificios bloqueados.

La Vicerrectoría de Sede reitera a la comunidad universitaria su compromiso con la adopción de las garantías académicas y de bienestar, una vez los miembros de la mesa negociadora, delegados por la asamblea multiestamentaria, acepten la solicitud de entrega del bloque D del Campus Palogrande.

Asimismo, la entrega de los edificios C y H está sujeta a la negociación del pliego de exigencias, el cual no se ha discutido porque en la propuesta metodológica se decidió iniciar con la negociación de las garantías.

Es importante resaltar que tanto la Dirección de la Sede como la mayoría de los miembros de la mesa de negociación están de acuerdo con dichas propuestas.

Finalmente, la Vicerrectoría reafirma su llamado a clases el 22 de julio de 2024 y a la continuación de las actividades deliberativas en el marco de la constituyente universitaria.

Cordialmente,

Belizza Janet Ruiz Mendoza

Vicerrectora de Sede

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