LA PATRIA | MANIZALES

Cuatro días y medio ajusta desaparecido Jaicol Alejandro Giraldo Vanegas, de 4 años, quien fue, al parecer, raptado por su papá el pasado viernes, en el barrio Solidaridad, de Manizales. Una prima de la afectada le contó a LA PATRIA antenoche que la mamá tuvo una discusión con el hombre, pues este "pidió $100 mil para comprar vicio, pero solo pudo darle $50 mil. Se enojó y quiso llevarse unos tenis nuevos del niño para venderlos".

Añadió que rasguñó a la madre del menor con una varilla e intentó agredirla con cuchillo, pero no lo logró porque su papá se metió. Todo ocurrió delante del infante.

La madre de Jaicol Alejandro fue a la tienda a comprar algo y cuando volvió no encontró a su hijo, ni parte de la ropa de él. Sí había una nota amenazante que dejó el sujeto: "Ni para usted, ni para mí. Primero me 'fumó' al niño y luego me mató yo". Apagó el celular, lo han buscado en residencias, en Chinchiná y donde la abuela en Estambul. En esta última casa indicó que se llevaría a Jaicol Alejandro para Bogotá.

Policía de Infancia y Adolescencia estuvo en la casa de la afectada, luego de que este medio le dio a conocer la situación, y ayer pondrían la denuncia. Si tiene información llame al 123 de la Policía o al 606 878 1700 extensión 209, de LA PATRIA. Jaicol Alejandro tenía sudadera azul, camiseta blanca, zapatos grises con azul.

Los padres llevan siete años de convivencia.

Peleas entre padres

La psicóloga María José Ruiz Pastor indicó en www.guiainfantil.com que cuando el niño es testigo en edades tempranas de peleas y discusiones entre los padres se sentirá angustiado e incluso culpable de lo que ocurre.

"El niño no entiende el mundo de los adultos. Si a edades muy tempranas ve peleas entre los padres es muy probable que trate de averiguar qué significa para él lo que está ocurriendo. Puede pensar 'esto es por mi culpa', mis papás se van a divorciar y ¿qué va a pasar conmigo?'. Esta situación le generará un gran malestar y buscará la manera de intervenir para reducir su angustia".

Añadió que las investigaciones muestra que los padres se diferencian en la manera de manejar conflictos, algunos siguen patrones destructivos, utilizando amenazas, expresiones hostiles e insultos; otras parejas muestran unas conductas más beneficiosas, hablando del problema, pero mostrando afecto, apoyo, sentido del humor. Lo importante es buscar una solución en lugar de un culpable.

"Cuando los padres solucionan sus diferencias de una manera más constructiva los niños muestran menos angustia, además de aprender cómo el cariño, el buen humor y el afrontamiento de los problemas contribuye a resolverlos, manteniendo un buen ambiente familiar. Estos hogares garantizan la seguridad y felicidad de los hijos".